Nuevos movimientos de la junta neonazi tras una derrota estratégica

Hoy se está discutiendo en Minsk, dentro del llamado Grupo de Contacto, una posible tregua o alto el fuego en el Donbás. Al igual que con la anterior tregua de finales de julio, es un movimiento al que se ve obligada la junta neonazi de Kiev por los constantes reveses que está sufriendo y la pérdida de material y hombres.

La junta ha reconocido 839 soldados muertos y 3.044 heridos, pero esta cifra está muy por debajo de la real. Aunque sigue una censura férrea sobre lo que está pasando en el Donbás, algunos periódicos ucranianos se atreven a dar otras cifras y aumentan en 10 los muertos, hasta los 849 hasta el 1 de septiembre. También ayer el hospital de Zaporizhe reconició que habían entrado en su morgue 130 cadáveres de soldados, lo que pone de manifiesto una vez más que la junta neonazi miente una y otra vez puesto que estos cadáveres no están contabilizados en las cifras de la junta.

Documentos oficiales y secretos desvelados en julio, y que os puse aquí, ya hablaban entonces de 1.400 muertos y 4.723 heridos. Era el día 26 y se día dio comienzo este modesto blog puesto que me comenzaban a llegar informaciones como esa y consideré que debía hacerlas públicas dada la inacción de los progres y su alucinante silencio respecto a la lucha antifascista del Donbás. Ahora parece que algunos han salido de su aletargamiento, y mucho ha tenido que ver en ello la maniobra rusa con el envío del primer convoy humanitario. También podéis ver otra cifra de las bajas de las fuerzas de la junta neonazi de Kiev aquí. Y está circulando por la red que el número real de bajas, entre muertos y heridos es de 32.702 y en cuanto consiga estos datos con mayor claridad os los ofreceré. Luego que a nadie le quepa duda que la junta está derrotada, política y militarmente por mucho que Poroshenko se haga fotos con la OTAN y por ello se ve obligado a ofrecer el alto el fuego.

Ayer las milicias liberaron 23 pueblos (Illyria, Pedro el Grande, Schetovo, Kazakovka...), se han hecho con el control del aeropuerto de Luganks y tienen totalmente cercados a los soldados de la junta en el de Donetsk. Esto es da una idea de lo que está ocurriendo. Aquí tenéis un vídeo de la liberación de Iloviansk, una de las zonas donde el desastre de la junta ha sido mayor, y de parte del material incautado y destruido. La sonrisa de la niña es impagable, y a buen seguro que las milicias agradecen encarecidamente a la junta el regalo en material.

También porque, como os dije aquí, Rusia tiene decido reconocer a las repúblicas populares de Donetsk y Luganks y ya ha dado una pista clara: cuando Putin solicitó una tregua y un intercambio de prisioneros utilizó claramente el término de Nueva Rusia. Y también, porque cada vez es mayor el número de muertos y ya no se pueden ocultar, lo que se traduce en que el 60% de la población del Este de Ucrania quiere que se pare ya la guerra, un porcentaje muy alto de cara a las elecciones de octubre.

Mi opinión es que este movimiento de la junta neonazi se complementa con la decisión de ir a una nueva estrategia defensiva: hacerse fuerte en las localidades que controla del Donbás (como es el caso de Mariupol, donde se han refugiado los batallones nazis Azov y Donbass) y dejar que sean las milicias quienes se desgasten con los ataques. Con la tregua se garantiza también que el movimiento insurreccional no va a trasladarse a las otras partes de la Nueva Rusia histórica: Zaporozhye, Jarkov, Odesa, Jerson, Nikolaev y Dnepropetrovsk. Sin embargo, ya ha comenzado la ofensiva de las milicias contra Mariupol y y no descarto que se hagan con el control de la ciudad en breve si no se firma el alto el fuego y a pesar de lo que os digo más arriba, lo de la defensa estratégica. Sé que parece una contradicción, pero no lo es tanto.

A pesar de su abrumadora superioridad en hombres y material, las constantes derrotas han obligado a la junta neonazi a cambiar a esta defensa estratégica por dos razones: para evitar la sangría definitiva y para garantizar una cierta tranquilidad de cara a las elecciones que ha convocado para el 26 de octubre. Si falla, Poroshenko ya tiene firmada la orden para un cuarto reclutamiento, lo que da una idea de la magnitud del desastre al que se enfrenta y las bajas que está sufriendo. En esta ocasión serían llamados a filas todos los hombres de hasta 60 años. Aquí está el documento. También se decretaría la ley marcial.

Si hay alguien que lo pueda traducir estaría muy agradecido, eso ayudaría a este blog y me quitaría un poco de trabajo..

Además, la junta neonazi está negociando la compra de armamento a Polonia y helicópteros a Mongolia. O sea, un rearme en toda regla para pasar de nuevo a la ofensiva cuando considere que se ha repuesto de la derrota. Pero hay un pero: llega el invierno y tiene que dedicar todo su esfuerzo monetario no al Ejército, como hasta ahora, sino a la cuestión del gas. Ya os dije aquí que Rusia ha hecho una oferta que tiene que aceptar porque así se lo impondrá Alemania, y en esto no hay vuelta atrás. Los bancos han prohibido que los clientes puedan sacar moneda extranjera, está prohibido –como lo leéis- publicar las tasas de cambio, se ha hecho un llamamiento a la población para que acapare leña y carbón… Lo sorprendente del caso es que la reacción contra la guerra no se traduce en huelgas ni cosas por el estilo, no vamos a hablar de sabotajes, lo que dice mucho del tipo de personal que hay en el Este de Ucrania. Sólo los familiares de los reclutas son quienes se movilizan. Los demás se sitúan en esperar y ver quien es el vencedor. Porque cada vez hay más rumores de un posible golpe militar, aunque no tengo claro hacia dónde, si para poner un poco de cordura a la junta neonazi o para perderla definitivamente. Esta es otra de las razones para que Poroshenko pida el alto el fuego.

La derrota de la junta es total, la quiebra política y moral, también. Siempre he evitado ser demasiado optimista, pero ahora lo que veo es eso. Acabo de recibir dos cosas: un vídeo de los alistamientos de voluntarios en las milicias y la información de que en lo que va de mes de septiembre hay 1.500 solicitudes de alistamiento en ellas -es consecuencia de todo lo dicho más arriba-, pero no tengo tiempo para ponerlo ni desarrollarlo. Tampoco para hablar de la cumbre de la OTAN y otras cuestiones pendientes. Se acumula la información y las cuestiones, pero procuraré ir dando salida a todo lo prometido.

El Lince