La Brigada Verde (y más)
Para mi sorpresa, resulta que esta página está siendo seguida en Gran Bretaña, en Escocia en concreto. Y el comentario gracioso del otro día de que cuando la peña estaba entretenida con el fútbol desde el palco de uno de esos estadios varios magnates árabes lo que veían era el discurso del portavoz de Hamás, Abú Obeida, sobre lo que es ya una derrota para el IV Reich sionista después de 100 días de la ejecución del genocidio y la limpieza étnica en Gaza, ha dado pie a que desde allí me hayan enviado algo bastante curioso y que en el Estado español solo es equiparable a los Bukaneros del Rayo Vallecano (durante muchos años viví en Vallekas, con k, así que aunque no veo fútbol, este será siempre mi equipo). Puede que haya otros ejemplos, pero ninguno será comparable para mí.
A lo que voy: la Brigada Verde es un colectivo de aficionados al Celtic de Glasgow claramente antifascista y muy comprometido. Pinchad para ver más. Solo decir que desde su fundación, en 2006, han defendido con tesón la causa de Palestina, lo que les ha producido varios dolores de cabeza por intento de clausurar, incluso ilegalizar, el colectivo. Hasta ahora han salido siempre airosos.
Desde el 7 de octubre, fecha de la audaz acción de la resistencia palestina, la Brigada Verde no ha rehuido su compromiso y ese mismo día ya aparecieron en las gradas pancartas con lemas "Palestina Libre. Victoria a la resistencia". Eso provocó que el club entrase en pánico, otra vez, y sancionase con la expulsión a la grada de la Brigada Verde, al tiempo que inició una campaña para prohibir las banderas palestinas por "ilegales". Y se prohibió entrar con ellas. Esto también ha ocurrido en muchos otros lugares, incluido el Estado español.
Pero la Brigada Verde no solo recurrió, sino que dijo que le daba igual. Se la multó (no era la primera vez por algo similar) y en poco días recaudó cuatro veces más de lo que era la multa. Dinero que enviaron a Palestina, puesto que allí hay un equipo de fútbol que patrocinan, en el campo de refugiados de Aida. Y ganaron. Y han vuelto a la carga. En el partido del pasado fin de semana sacaron estas pancartas:
Es la "Canción navideña para un prisionero", una balada del IRA irlandés. Porque esta es otra seña de identidad de la Brigada Verde: la solidaridad con el republicanismo irlandés dado que el club se formó por inmigrantes irlandeses.
Por si tenéis interés, aquí está un buen reportaje sobre ellos.
Y ya puestos a escribir este fin de semana, algo también inusual, aquí hay una petición de Martín sobre Julian Assange y Gonzalo Lira. El primero está a punto de ser extraditado a EEUU (en contra de lo que en diversas ocasiones ha dicho la ONU) y el segundo ha muerto en una cárcel de los nazis ucranianos.
Y os recuerdo que hasta la fecha van 119 periodistas palestinos asesinados por el IV Reich sionista.
Todo ello cerrado con una foto de los Bukaneros en un partido del Rayo Vallecano y con un grupo que nació en Vallekas, Ska-p, y su emblemático "Intifada". Y con alguno de sus integrantes he tomado más de unas cuantas cervezas.
Buen fin de semana.
El Lince
https://frenteantiimperialista.org/wp-content/uploads/2024/01/Cartel-final-768x543.jpeg
ResponderEliminarGracias por el Aviso.
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ResponderEliminarUna lástima que el St Pauli haya renegado de su historia y apoye a la entidad "israel" en su genocidio palestino
ResponderEliminarDespués del ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre, el St. Pauli emitió un comunicado condenando los hechos y expresó su solidaridad con el HAPOEL de Tel Aviv, un club israelí con el que está hermanado. "Condenamos el fundamentalismo religioso, los abusos de los derechos humanos y la brutalidad indescriptible del régimen de Hamás", se leía en el escrito. En el mismo también se criticaba al Gobierno de Benjamín Netanyahu, pero la polémica ya estaba creada. Varios clubes internacionales de fans mostraron en redes sociales su descontento por la simpatía del St. Pauli hacia Israel y tres días más tarde, el 10 de octubre, 14 de ellos, entre los que se encontraba el catalán, con sede en Barcelona, firmaron un comunicado de respuesta.
Eliminar"El club no se ha posicionado a favor de los civiles palestinos que viven bajo un bloqueo constante desde hace 14 años", rezaba el texto de los 'international supporters', que se declaraban comprensivos con la directiva porque "la relación de Alemania con Israel es delicada", pero que al mismo tiempo reclamaban "un cambio de opinión". Esas palabras encendieron los ánimos en las oficinas del St. Pauli, donde no siempre se han recibido bien las opiniones de fuera, especialmente de aquellos que se han acercado a la entidad por moda. Y, en ese tono, la coordinación de peñas del club emitió un tercer comunicado. "Algunos fanclubs han cruzado la raya", aseguró. "Minimizar y legitimar los ataques terroristas de Hamás no es una opinión y es completamente inaceptable", prosiguió y desde ese momento el divorcio es un hecho.
En los últimos días, muchos clubes de fans del St.Pauli, como el vasco o el catalán, han anunciado su desaparición o, como mínimo, el fin de actividades. "Si el club y su gente justifican esta masacre continuada [en relación a Gaza], nosotros nos vemos obligados por nuestros valores a dejar de pertenecer a él", proclamaba el grupo de Bilbao. "Después de la declaración de la coordinación de peñas que nos acusaba de legitimar a los asesinados de Hamás hemos decidido suspender todas las actividades", añadía el de Barcelona. La directiva del St. Pauli está intentando mediar, ha prometido una reunión con los 'fanclubs' internacionales a final de temporada, pero hoy por hoy la distancia parece insalvable.
https://www.elmundo.es/deportes/futbol/bundesliga/2023/11/22/655de018e85ece48678b45bf.html
Ya que todos hablan de fútbol yo también: Peñarol es el equipo de mi corazón, pero, en América del Sur, también simpatizo con el Palestino de Chile y en Europa con el Athletic Club de Bilbao.
ResponderEliminarGracias por la mención
ResponderEliminarDEFENSA DEL FÚTBOL
ResponderEliminarEl fútbol es una religión benévola que ha hecho muy poco daño. M.V. Montalbán.
INTELECTUALES
El fútbol se parece a Dios por la devoción que le tienen sus seguidores y la desconfianza de muchos intelectuales para los que diferenciarse de la gente común es su legitimidad, su desconfianza nace de ser el deporte popular por excelencia orientado a incultos y paletos que no tienen interés por otros temas. Muchas personas de clase media con estudios y amantes de la literatura consideran incompatible cultura y fútbol. Al mundo de la cultura le espanta lo sectaria que es la masa que para disfrutar de este juego necesita amar a un equipo y odiar al otro, y en la creencia de que este menosprecio les prestigia. Esa superioridad moral que se auto atribuyen es una falacia saturada de demagogia y complejos que está en vías de desaparecer.
Pero el fútbol dejó de ser cosa de ingleses y de ricos; en Buenos Aires nacieron los primeros clubes de fútbol en los talleres de los ferrocarriles y los puertos. El primer club se llamaba “Mártires de Chicago” en homenaje a los obreros anarquistas ahorcados un 1º de mayo. En aquellos inicios del siglo 20 no faltaron intelectuales de izquierda que celebraron al fútbol en lugar de repudiarlo como anestesia de la conciencia. Actualmente hay peñas de seguidores como los del San Pauli, de Hamburgo, cercanos a los movimientos contraculturales, Indar Gorri (Fuerza Roja) del Osasuna de Navarra, abertzales de extrema izquierda o los Bukaneros del Rayo Vallecano, un club de barrio y conciencia obrera.
ESCRITORES
Elogiaron el fútbol: Albert Camus, “Lo que más sé acerca de moral y de las obligaciones de los hombres, se lo debo al fútbol”. Pier Paolo Pasolini lo asemeja al lenguaje: “Puede haber un fútbol poético y otro en prosa” y para Heidegger, el pensador alemán más importante del siglo 20, el fútbol fue su pasión oculta que hizo pública a los ochenta años, o el escritor marxista Antonio Gramsci que consideraba el futbol como un reino de la lealtad humana ejercida al aire libre.
Eduardo Galeano “el maestro que unió la literatura y el fútbol”, junto a Mario Benedetti, Miguel Ángel Asturias o Gunter Gras y aquí Alberti, Cela, Delibes, V. Verdú, Javier Marías, M.V. Montalbán o Almudena Grandes: “El fútbol forma parte de la educación sentimental de las personas” quien, a su muerte, recibió el homenaje de un minuto de silencio del público del estadio del Atlético de Madrid. El futbolista británico Simon Kuper escribe sobre temas deportivos desde una perspectiva antropológica en The Observer, The Guardian y Financial Times, o aquí Daniel Entrialgo, periodista, ha escrito sobre fútbol artículos y varios libros.
Santi Ochoa. Madrid. 2022
El artículo completo en: https://kaosenlared.net/defensa-del-futbol/