jueves, 31 de enero de 2019

Lecciones de historia

La primera es de López Obrador frente a Pedro Sánchez, un neocolonialista ignorante. La historia es sobre México, el discurso es sobre Venezuela. Y lo dice mirando a su ignorante interlocutor. Bien.


La reacción venezolana tiene que tentarse la ropa. Hará manifestaciones "pacíficas", alejadas de las guarimbas violentas de los últimos años, pero su margen de maniobra no es tan grande como hace unos días. Rusia se está despertando y, aunque lejos geográficamente, avisa que va a defender sus intereses. Y lo ha hecho cuando los reaccionarios han cometido el mismo error que los neonazis ucranianos y que los jihadistas sirios: decir que van a "revisar" los contratos firmados con el gobierno de Maduro. En Ucrania los neonazis quisieron terminar con el acuerdo que mantenía la base naval de Sebastopol hasta el año 2047, y el resultado fue que Crimea está incorporada a Rusia tras un referéndum de autodeterminación en ese sentido. En Siria, los jihadistas quisieron terminar con la base naval de Tartus y el gobierno sirio pidió ayuda a Rusia para ganar la guerra.

En Venezuela Rusia tiene miles de millones invertidos, sobre todo en el petróleo, claramente el botín que quiere EEUU y que dejará alguna migaja para su vasalla Europa. La reacción ya tiene su programa privatizador de todo y de todos, y el anuncio de que "revisará" los contratos firmados con Rusia ha puesto el engranaje en marcha. Ya solo falta China (que tiene invertidos 50.000 millones de dólares desde un poco después de que Chávez iniciase su presidencia) para que la cosa adquiera otro carácter.

La reacción venezolana tiene un programa de privatización masiva de los bienes del Estado, es lo que denomina "leyes de transición" y que incluye cosas como "eliminar el modelo centralizado de controles de la economía y ser reemplazado por un modelo de libertad y mercado bajo las garantías de los derechos de propiedad y la libertad de empresa" (sic). Es decir, la devolución a los antiguos propietarios de las pocas empresas que se hayan expropiado y el no reconocimiento del pacto que Chávez firmó con los terratenientes agrícolas y ganaderos conocido como "Acuerdo Cha-az" (Chávez-Aizpurúa, un gran terrateniente de Barinas). Eso fue el origen de la "política de conciliación de clases" que puso en marcha Chávez y cuya cosecha se ve ahora.

O sea, que estamos ante la segunda lección de historia, de cómo la reacción se ensaña cuando retorna triunfante. Ya lo cantaba hace mucho el cubano Carlos Puebla, "si tú no acabas con ellos, ellos acaban contigo". Porque se habla abiertamente de "reestructuración de empresas", es decir, de su desmantelamiento si son consideradas deficitarias, lo que va a conllevar despidos masivos de trabajadores de las empresas estatales (y ya se ha anunciado la contratación "prioritaria" en su puesto de los saboteadores de PDVSA despedidos por Chávez por apoyar el golpe contra él de 2002).

Pese a todo, y pese a todas las señales, aún está pendiente la acción del gobierno, que todavía no da los pasos necesarios y valientes para adelantarse a la reacción y asfixiarla. Ha habido un tímido intento, cuando Diosdado Cabello, uno de la camarilla, ha dicho que 2 millones de milicianos están preparados para actuar. El otro día os dije que se había publicado no hace mucho que sus integrantes eran entre 8 y 9 millones. Puede que la cifra se hubiese inflado y que la que se da ahora sea más cercana a la realidad. Está bien, lo interesante es que ¡por fin! parece que se han enseñado un poco los dientes aunque aún no se ha hecho nada contundente más que, otra vez, amenazar un poquito.


El Lince

lunes, 28 de enero de 2019

8.000 millones

De dólares. Ese es el dinero que Venezuela tiene en bancos occidentales. Ese es el dinero que la reacción mundial va a dar ahora a la mal llamada "oposición", al "gobierno paralelo" que han permitido en su estulticia Maduro y su camarilla. Era algo anunciado y os lo dije. No hacía falta ser muy avispado para verlo. Y si lo vi yo, que soy un don nadie, ¿cómo es que no lo vieron Maduro y su camarilla? Es a lo que lleva el haber permitido durante un año y medio el "poder dual", el hablar y no hacer. Ahora están con las manos atadas. Desde luego, Fidel Castro estará revolviéndose en su tumba.

Si no todos, una buen parte de esos 8.000 millones de dólares van a servir para financiar el golpe. EEUU ya ha dicho que va a entregar a su títere los fondos que tiene Venezuela allí y que ha estado reteniendo durante años. Lo mismo que va a hacer con las compras de petróleo, un dinero que va a irá a "cuentas bloqueadas para la oposición", además de imponer sanciones. Y Venezuela seguirá vendiendo petróleo a EEUU, como si no pasara nada.

El gobierno venezolano está noqueado, pese al apoyo del Ejército y de buena parte de la calle. Cada día de inacción se aprieta un poco más la soga a sí mismo. Y los estúpidos intentos de Maduro de lograr algo de cordura en sus agresores externos -como el dar un plazo de 30 días a EEUU para negociar una "oficina de intereses"- no son otra cosa que una buena muestra del miedo con que está actuando. Y el miedo es siempre reaccionario y conservador.

La reacción interna tiene ahora dinero a espuertas para manejar, para fortalecer el "gobierno paralelo". Lo principal ya está hecho, con independencia de quién sea el títere al que se apoye desde el exterior.

Sólo la acción decidida -que no veo por ninguna parte- puede paralizar los esfuerzos occidentales, para detener el golpe de Estado. Porque ahora ya no hay una Rusia que salga en apoyo del gobierno legal y legítimo, como en el caso de Siria. Rusia está muy lejos geográficamente y eso la excluye de cualquier papel protagonista para defender a Venezuela. Sólo en el ámbito diplomático, y eso ahora es poco y de recorrido muy corto.

Por lo tanto, todo depende del Ejército y de las milicias que, por cierto, no han aparecido todavía. No hace mucho se publicaba que entre 8 y 9 millones de personas estaban integradas en ellas y que eso, por sí mismo, era una garantía de defensa de la "revolución bolivariana". Recuerdo que el PCUS tenía 20 millones de militantes cuando un sector del ejército intentó, en agosto de 1991, parar la descomposición de la URSS, 20 millones que se quedaron en sus casas con sólo muy honrosas excepciones. 20 millones que no defendieron ni a la URSS ni el socialismo en el que supuestamente creían, con todos sus fallos. Y con sus aciertos.

Si el ejército y las milicias dejan patente, no sólo con declaraciones, que están dispuestos a hacer que la agresión contra Venezuela sea costosa (interviniendo los bancos, como primer paso) se podrá parar el golpe. Sólo si Rusia y China encuentran una forma de responder a la agresión de Occidente contra un país soberano -y tampoco están pasando de las palabras- se podrá parar el golpe.

El Lince

jueves, 24 de enero de 2019

¿Y de quién es la culpa?

Intento de golpe de Estado en Venezuela. Normal. La estupidez congénita de la dirigencia "chavista" al permitir el "poder dual" ha llevado a esto. Se debió disolver el parlamento cuando se aprobó la Asamblea Constituyente, hace un año y medio, y no se hizo. Se dejó a la reacción seguir trabajando, erosionando y cimentando relaciones. Ahora toca lamentarse, otra vez.

Desde de la muerte de Chávez, que también tuvo su parte de culpa en la situación que vive Venezuela, sus sucesores sólo han hecho dos cosas bien: abandonar la OEA y poner en marcha el petro. Pero lo han hecho a su ritmo y dejando siempre formas de respirar a la burguesía. Hasta que se llega a esto. Ahora el "poder dual", el "gobierno paralelo" tiene apoyo formal del extranjero (con reconocimiento de "presidente" incluido), y el camino se hace mucho más pedregoso.

Toda la derecha internacional, la vieja y la nueva, apoya el golpe. ¿Derecho internacional? A la mierda otro de los "valores democráticos". Está bastante claro el interés de EEUU de expulsar a Rusia y a China de América Latina -y de Venezuela en particular, de forma especial tras los apoyos recientes recibidos de estos países- y de ahí su movimiento, que ha sido seguido por todos sus vasallos, de reconocer al "gobierno paralelo". Hay una forma fácil de constatar cómo está el mundo: la de quienes apoyan el intento de golpe dirigido por EEUU y la de quienes no. El sarcasmo y el esperpento lo pone Macron al apoyar las protestas contra Maduro mientras reprime a los "chalecos amarillos" en casa.

El gobierno venezolano dice que tiene el suficiente apoyo para parar el golpe. Cierto. Tiene apoyo interno, de una gran parte del pueblo, y externo. Y aquí hay un país crucial: México. López Obrador ha actuado bien, como hay que actuar, al respaldar la legitimidad del gobierno pero... Ha utilizado una expresión conocida: "por ahora". Este "por ahora" es un toque de atención muy serio a Maduro y su camarilla, que están obligados, sí o si, a dar los pasos que han estado evitando con tanta ineptitud.

El Ejército venezolano ha dicho que no reconoce al "presidente" nombrado por EEUU y aceptado por sus vasallos. Lo mismo han dicho las Regiones de Defensa Integral. Maduro es el presidente constitucional y eso lo han dicho y lo defienden. Es decir, los militares lo ven como lo que es: un intento de golpe de Estado.

Eso va a frenar durante un tiempo la fuerza de la ofensiva, pero no la va a parar del todo. Se volverá a las guarimbas, se intentarán nuevos levantamientos policiales y/o militares y arreciará la agresión externa a nivel diplomático.

Dije, y mantengo, que no tengo ninguna esperanza en la dirigencia pero sí en el pueblo. Dije hace año y medio que era entonces el momento y entonces decía que era "ahora" cuando había que dar el salto definitivo. Eso fue hace año y medio. Volved a leerlo porque no ha perdido nada de actualidad.

Dije, y mantengo, que había que retirar el capital de los bancos occidentales -y no se hizo, como ha tenido que comprobar el personal con la negativa de Gran Bretaña a repatriar el oro venezolano-, que había que nacionalizar todas las industrias de los instigadores del desabastecimiento alimenticio, dejar de pagar la deuda externa y amenazar con romper relaciones diplomáticas con todos los países que dan sustento a los golpistas. Todo ello es más urgente que nunca. Imaginaos sólo un momento si Fidel Castro hubiese perdido tanto tiempo desde las agresiones imperialistas en dar los pasos necesarios para romper con EEUU y nacionalizar todos los sectores productivos vinculados al imperialismo.

Hay gente que está comparando esto con el golpe de Estado contra Chávez en 2002. Error. Con lo que hay que compararlo es con la Libia de 2011. Entonces, igual que ahora, los "mercados", es decir, el capital internacional, apostó por el "cambio de régimen" y lo hizo provocando las revueltas internas y, sobre todo, provocando el desabastecimiento del país para alimentar esas revueltas. Al igual que hizo Gadafi, Maduro todavía mantiene irresponsablemente miles de millones de dólares fuera del país, muchos de ellos en EEUU, que los tiene retenidos ilegalmente. Entonces, al no poder disponer de todo ese dinero que estaba fuera del país, los bonos libios perdieron casi todo su valor y Gadafi fue derrocado, aunque tuvo que haber una intervención exterior, una guerra impuesta. Al desaparecer Gadafi, esos bonos subieron somo la espuma y el capital internacional fue bastante más rico mientras Libia se sumía en el caos. Venezuela lleva el mismo recorrido pero con una diferencia: EEUU no necesita ahora la agresión pura y dura, le basta con las sanciones y el descongelar esos miles de millones de dólares que tiene retenidos y dárselos a su "presidente". El "poder dual" tendría dinero para repartir y eso erosionaría mucho más al gobierno legal y legítimo. A esto es a lo que ha abocado la inacción de Maduro y su camarilla.

Se ha perdido un tiempo precioso en Venezuela y se ha complicado mucho más la situación. Pero no hay que buscar las culpas fuera. Están dentro. En Maduro y su camarilla. Cómo reaccionen será determinante para el futuro y la ruptura de relaciones con EEUU es incompleta si no va acompañada de medidas similares con el resto de países vasallos (Brasil, Colombia, Argentina, Ecuador, Perú, Costa Rica...) y un combate total contra el "poder dual", la corrupción, la acaparación de bienes y el sabotaje económico. Y de la nacionalización de los bienes de estos países. Por ejemplo, EEUU acaba de prometer 20 millones de dólares en "ayuda humanitaria" a la "oposición". Es el primer paso para lo que os decía más arriba. ¿Maduro y su camarilla necesitan alguna excusa más para las nacionalizaciones y para dar fuerte a la oligarquía o van a seguir tonteando como hasta ahora? Porque su tiempo puede acabarse muy rápidamente.

El Lince

lunes, 21 de enero de 2019

Zig-zag sindical

Sábado 19, Acto X de los "chalecos amarillos" de Francia. Nada reseñable. Más o menos la misma gente, más o menos los mismos policías, más o menos los mismos heridos, más o menos los medios de propaganda más comedidos y más ecuánimes...

Pero...

1.- A un día de la firma del tratado franco-alemán, la sucesora de Merkel dice que está "muy preocupada por lo que ocurre en Francia", por un movimiento que no cede y que se está extendiendo por toda Europa (en Bélgica, por ejemplo, donde ya están en su quinta semana) aunque "en Alemania hay otra tradición política para plantear la desigualdad entre ricos y pobres". Mira tú por dónde, ahora todo el mundo reconoce lo obvio y lo que está en el origen de la revuelta de los "chalecos amarillos".

2.- Los "chalecos amarillos" han decidido dejar en paz a los paniaguados de los medios de propaganda, por ahora, y centrar su ataques en los mismos medios y en sus propietarios. Esto se debe a que 25 representantes de otros tantos comités de empresa de esos medios de propaganda han hecho pública una autocrítica por cómo han venido tratando al movimiento y reconociendo el "distanciamiento de la realidad social". Ahora dicen, en un golpe de pecho, que "los medios de comunicación no han estado a la altura y han fallado en su cobertura". Pero claro, piden no convertirse en el "chivo expiatorio" del cabreo contra el gobierno y en que "no se ataque a la libertad de prensa". Por primera vez se retransmitió en directo -en la localidad de Rennes- una movilización de los "chalecos amarillos" por parte de una televisión, la BMF, y se vieron imágenes de la violencia policial.

3.- El gobierno, después de negar y amparar la violencia policial, dice ahora que "nadie puede estar satisfecho por esta situación" y da luz verde para "investigar 80 actuaciones policiales por si no se ha respetado la norma de uso de las armas" que han producido las heridas graves a casi 100 manifestantes.

Y a todo esto, lo que se ve es el zig-zag de los sindicatos, de forma especial la principal central que es la CGT. Sí pero no, no pero sí. El caso es que todavía, y salvo una muy modosita movilización el 14 de diciembre, no han dicho esta boca es mía. Bueno, decir sí dicen, lo que no hacen es hacer. Acuciada por varias secciones sindicales, por varios sindicatos de rama, la dirección de la CGT ha tenido que responder y dice que no puede haber una conjunción de luchas con los "chalecos amarillos" porque "es un movimiento que no tiene coordinación nacional" y que en su seno hay gente que "exige la eliminación de las contribuciones sociales" (en referencia a los simpatizantes del neofascista Frente Nacional que sí estuvieron pero que ahora no lo están). Eso choca frontalmente con la reivindicación que esgrime ahora el movimiento y que habla del mantenimiento y fortaleza de los servicios públicos pidiendo la desprivatización de los privatizados incluyendo la compañía telefónica France Telecom.

La dirección del sindicato quiere justificar su zig-zag diciendo que el gobierno es "un incendiario social" pero que está dispuesto a negociar con él como lo demostró el 10 de diciembre yendo a una reunión en la que el gobierno reconoció haber cometido errores, "pero que no ha rectificado en nada". Es una actitud miserable, puesto que muchos de los heridos, incluidos los heridos graves, pertenecen al sindicato y los está dejando abandonados.

Dos meses después es ya claro qué es el movimiento de los "chalecos amarillos" y es, también, un rechazo del inmovilismo que caractetiza a las direcciones políticas y sindicales "de izquierda", domesticadas por el capitalismo al que no combaten más que de palabra y eso en el mejor de los casos. No son anticapitalistas y su discurso en ese sentido es absolutamente vacío, superficial e inofensivo para el poder.

La CGT continúa con su zig-zag, sin atreverse a dar el paso definitivo. Y el movimiento de los "chalecos amarillos" no está esperando a esta central sindical, ni a ninguna. Continúa su camino en solitario. Eso hace que la preocupación del sistema siga porque la estrategia del miedo ya no funciona, porque la gente ya no teme a la violencia policial y porque los miles de heridos y/o mutilados ya han comenzado a golpear las conciencias a escala masiva. Ya no se puede ocultar la barbarie, la estrategia represiva comienza a ser contraproducente y la radicalización de la gente es evidente. Se dice que el Estado tiene el monopolio de la violencia y que esta es legítima, pero cuando el Estado recurre a la violencia es que es débil, que no puede ser obedecido de otra manera. Y eso es, ahora mismo en Francia, muy buena señal. Con o sin los sindicatos, los "chalecos amarillos" lo tienen claro: "la lucha continúa".


Este Acto X ha tenido un lema central: "En memoria de los muertos y heridos desde que comenzó el movimiento". La mayoría de las convocatorias también denunciaban la violencia policial, que sigue.






Y uno de los emblemas de la revuelta: el ataque a los negocios de lujo.


El Lince

viernes, 18 de enero de 2019

Pues sí, el ataque ha tenido sus frutos

La novena movilización de los "chalecos amarillos" en Francia se distinguió de las anteriores en que se expulsó y/o se atacó a los que se dicen trabajadores de los medios de propaganda. Fue el hartazgo, el hastío, la ira con cómo esos medios han tratado, ninguneado, mentido, insultado a un movimiento que sigue batallando cada vez con las ideas más claras de lo que se quiere, que no es otra cosa que un nuevo sistema político, económico y social. Fue el hartazgo, el cansancio, el hastío, la ira, la rabia porque los medios de propaganda (antes llamados medios de comunicación) han venido ocultando sistemáticamente la brutalidad policial y la violencia institucional contra los "chalecos amarillos" y es eso lo que desembocó en esos ataques.

Eso provocó un choque en esos medios, sorprendidos. Pero vieron las orejas al lobo y se han visto obligados a reaccionar. Ahora llevan toda la semana hablando de lo obvio, recogiendo las cifras de heridos graves, de heridos en total y criticando a la policía y al gobierno. Aquí tenéis tres ejemplos: Le Monde, Liberation y France Info. Hay más, prácticamente todos se están tentando ahora la ropa y hablando de lo que han negado y ocultado durante nueve semanas. Tanto que ahora han destapado muchos casos policiales y eso ha obligado a reaccionar a la propia policía. El pasado día 15 el jefe de la policía francesa, Eric Morvan, dirigió un escrito público a toda la policía pidiendo (sic), o sea, no ordenando, que no se disparase pelotas de goma a la cabeza de los manifestantes. Os recuerdo que dos terceras partes de los casi 100 heridos graves han recibido disparos en la cabeza pese a estar prohibido formalmente en los mismos protocolos policiales. Precisamente ayer, a uno de esos heridos graves los médicos le indujeron al coma artificial temiendo por su vida.

Desde los "chalecos amarillos" se ha lanzado una pregunta ¿Debemos odiar a los medios de comunicación? Melenchón, el candidato de La Francia Insumisa (una especie de Unidos Podemos), se ha atrevido a decir que sí, que "es saludable hacerlo" porque hay una pelea en marcha y si unos odian (en referencia a los medios y sus propietarios), otros también tienen la potestad de hacerlo.

Decidan lo que decidan, actúen como actúen este próximo sábado en el Acto X, el hecho es que -otra vez- los "chalecos amarillos" ya han conseguido algo aunque sea temporalmente. Han roto el silencio y, también, el miedo. Los carteles con la imagen de los heridos graves se multiplican por todo el país.



Ahora mismo la burguesía está a la defensiva, intentando congraciarse en parte con el movimiento y lo están entendiendo los "chalecos amarillos" que ahora se ven entrevistados, casi mimados por esos mismos medios. Una semana llevan así. Dije que esto no iba a ser otra cosa que un chaparrón de verano, que duraría poco y que se vería en cómo tratarán el Acto X. Los "chalecos amarillos" están aprovechando el momento, pero no bajan la guardia para la movilización de mañana.

Mientras, y dado que llevo mucho tiempo sin poner música, aquí hay un tema que viene casi al pelo. Habla del imperialismo, pero se puede colocar aquí perfectamente. Y, de paso, hago un guiño a alguien a quien le gusta el cantante (y poeta).



El Lince

miércoles, 16 de enero de 2019

Tratado franco-alemán

Es típico de un gobierno debilitado en lo interno utilizar lo externo para aparentar fortaleza e independencia. Dos gobiernos debilitados, el francés por la revuelta de los "chalecos amarillos" y el alemán por el auge de los neofascistas y las amenazas estadounidenses por el gasoducto con Rusia, van a firmar el próximo día 22 un tratado de colaboración e integración que pone de relieve que sólo ellos son alguien en Europa y que el resto no tiene otra función que ser su servidumbre. Francia y Alemania son vasallos de EEUU, a partir del 22 el resto de países de la moribunda Unión Europea serán vasallos de ellos oficialmente.

El tratado franco-alemán tiene su miga, como todos los tratados. Empezando porque se retoma simbólicamente un acuerdo de 1963 entre De Gaulle y Adenauer y se rubricará en la antigua capital del imperio de Carlomagno. Todo un símbolo.

Imagino que los medios de propaganda pronto se dedicarán a hablar de sus bondades, pero yo voy a reflejar sus miserias. Os lo resumo.

- Capítulo 1: Asuntos Europeos.
Francia y Alemania promueven una política exterior y de seguridad común, efectiva y fuerte. Fortalecen y profundizan la unión económica y monetaria (más euro). Promueven la convergencia económica, fiscal y social.

- Capítulo 2: Paz, seguridad y desarrollo (con mucho, el más importante y extenso)
Francia y Alemania profundizan su cooperación en política exterior, defensa, seguridad interna y externa. Definirán posiciones comunes y convergerán cada vez más en sus objetivos y políticas de seguridad. Se prestarán asistencia por todos los medios a su disposición, incluida la fuerza armada, en caso de agresión armada contra sus territorios.  Desarrollarán la credibilidad de Europa en el campo militar, fortaleciendo así la Unión Europea y la OTAN. Desarrollarán un enfoque común para las exportaciones de armas. Habrá cooperación de sus ministerios de asuntos exteriores, incluidas sus misiones diplomáticas y consulares. Habrá cooperación judicial, de inteligencia y policial. Se creará una unidad común para operaciones de estabilización en terceros países (o sea, neoimperialismo y neocolonialismo, injerencia pura y dura, otra vez; os acordáis de lo que os contaba del EuroGendFor, la policía sin fronteras, pues aquí la tenéis y puede actuar tanto dentro como fuera). Asociación más estrecha entre Europa y África (neocolonialismo francés, de nuevo). Coordinarán sus posiciones sobre la ONU, consultando a los otros miembros de la UE. La admisión de Alemania como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU es una prioridad.

- Capítulo 3: Cultura, educación, investigación y movilidad.
Acercarán sus sistemas educativos, se priorizará el aprendizaje de sus dos idiomas (esto no está mal). Se desarrollará una universidad franco-alemana.

- Capítulo 4: Cooperación regional y transfronteriza.
Se crearán en ellas eurodistritos con habilidades apropiadas. Se potenciará el bilingüismo (esto tampoco está mal).

- Capítulo 5: Desarrollo sostenible, clima, medio ambiente y asuntos económicos.
Zona económica franco-alemana con reglas comunes. Creación de un Consejo Económico y Financiero que promueva la armonización bilateral de la legislación, particularmente en el derecho mercantil (negocios, claro)

- Capítulo 6: Organización.
Un miembro de cada gobierno participará una vez al trimestre, al menos, en la reunión de los gabinetes de gobiernos respectivos de cada país. Habrá un consejo de ministros franco-alemán (luego la UE...)

Y mientras, y como consecuencia del ataque a los medios de propaganda del pasado sábado, todavía todos están hablando ahora de la violencia policial, que consideran "desproporcionada". Si el domingo fue el "progre" Liberation quien hablaba de ella, acuciado por la respuesta de los "chalecos amarillos" contra los periodistillas, ahora es Le Monde quien considera que "la represión de los chalecos amarillos dejará huellas en una generación" (sic). Claro que no lo dice directamente sino que lo pone en boca de alguien que lleva años investigando sobre ello. Pero que quede claro que si no hubiese sido por los ataques del sábado, no lo habrían hecho. Si Liberation cifraba en número de heridos en 1.700, Le Monde sube la cifra a 2.000 y critica al gobierno francés por "utilizar armas proscritas en otros lugares de Europa". Poneos ahora a comparar, con Catalunya, por ejemplo, el papel de los medios de propaganda españoles.

El Lince

lunes, 14 de enero de 2019

¿Y todavía preguntan?

Este sábado ha sido el Acto IX de los "chalecos amarillos" franceses, con más participantes que la convocatoria anterior pese a las amenazas y al miedo que intentó extender el gobierno. El movimiento no decae, crece. Lo reseñable ha sido que en varias ciudades, en cinco exactamente, se echó de las manifestaciones, o se atacó, a los paniaguados de los medios de propaganda (antes llamados "de comunicación"). Sorpresa total. Sesudos medios como Le Monde editorializan sorprendidos: "¿De dónde viene la desconfianza a los medios de comunicación?".

Voceros del poder, posicionados con el poder desde siempre, y de forma especial durante las nueve semanas que lleva ya la revuelta, se encuentran ahora con una desagradable sorpresa para ellos: sólo el 24% de la población confía en su "imparcialidad y objetividad" y el rechazo se extiende. Cuando día tras día, semana tras semana, mes tras mes desde los púlpitos audiovisuales o escritos se ataca a los "chalecos amarillos", se ningunean sus propuestas o se destroza a sus integrantes con acusaciones de todo tipo la respuesta de ayer tenía que llegar. Es el cansancio, es el hastío, es la ira... "Una ola de odio contra los medios de comunicación", titula el "progre" Liberation para relatar las movilizaciones del sábado...

¿Y todavía preguntan por qué se les odia? ¿De verdad hace falta la respuesta?

La situación que sufren ahora es la consecuencia de cómo están tratando los medios de propaganda la revuelta. Y como han visto las orejas al lobo comienzan a aparecer informaciones sobre la brutalidad policial, hasta ahora minusvaloradas cuando no negadas u ocultadas. Por ejemplo, ya se habla abiertamente de los cerca de 3.000 heridos, casi 100 de ellos de gravedad. Y se publican gráficos, como este de Liberation.



Y lo que se ve, y lo que hasta ahora ocultaban los medios de propaganda es que la policía dispara a la cabeza pese a que los protocolos de la propia policía dicen que no, que debe ser a otras partes del cuerpo.

Ha tenido que producirse el Acto IX, ha tenido que expulsarse o atacar a algunos periodistillas para que los medios de propaganda publiquen la realidad. Los heridos graves, y heridas como Fiorina, no pueden ocultarse pero sí reducir sustancialmente el número de heridos, que este medio de propaganda baja a los 1.700, muy por debajo de los 2.891 que se contabilizaban hasta el sábado. Pero ya es una cifra considerable que hasta ahora habían ocultado. ¿Por qué? Si no hace falta la pregunta que ellos se hacen, tampoco hace falta esta. En los dos casos la respuesta es evidente. Sobre todo, porque las calles de Francia están empapeladas con imágenes como las que veis, de heridos por la violencia policial y dónde recibieron los impactos.



Se supone que esta gente que trabaja para los medios de propaganda es ciudadana, que sale a la calle y mira lo que ocurre a su alrededor. Si estos carteles están por toda Francia ¿cómo es que no se han hecho eco de lo que recogen hasta ahora? Es igual, no busquéis la respuesta porque está muy clara sólo con seguir la lectura o viendo u oyendo a los medios de propaganda.

Liberation sigue su reportaje haciendo una entrevista a la policía, como no podía ser de otra forma, y sacando la cara por ella y por cómo reprime. Entre otras cosas, dice que son mil los heridos entre la policía (¿de verdad se puede herir a los robocop? no van a cuerpo descubierto como los manifestantes precisamente) y que la policía está investigando 78 de estas actuaciones sobre "presuntos abusos policiales". ¿Presuntos? Cuando el propio protocolo policial dice que no hay que disparar a la cabeza no son presuntos, son abusos sin más. Liberation -el icono de los "progres"-, como el resto de medios de propaganda, vuelve a la casilla de salida, a situarse donde siempre, al lado del poder. Por un momento han dado la palabra a la realidad, a la verdad, pero cubierto el expediente vuelven a su trinchera con la aureola, ahora, de que han sido agredidos y que los "chalecos amarillos" "atacan a la libertad de expresión".

De nuevo gracias a mi entrañable amiga Danielle, voy a echar una mano a estos impresentables y a facilitarles un poco el trabajo. Sólo con entrar en esta página pueden encontrar nombres y fotografías de unos cuantos heridos. Lo sé, no soy francés y no la verán. Pero vosotros y vosotras sí. Y esto os servirá de ejemplo para vuestras realidades, para vuestros países porque en todas partes, en todas, ocurre exactamente lo mismo.

La policía, los jueces son imprescindibles para el mantenimiento del sistema. La connivencia de unos y otros con el poder no descansa sólo en afinidades sociológicas o ideológicas, sino en una visceralidad contra el pueblo que socaba sus privilegios. Unos y otros no vacilan al ponerse al servicio de la represión masiva que está produciéndose contra los "chalecos amarillos". Con la inestimable colaboración y arropamiento de los medios de propaganda.

Entrar en el discurso de la violencia sin hablar de la violencia estructural es una estupidez que sólo refuerza al sistema. Y cuando el hartazgo hace que el vaso se desborde, es cuando los medios de propaganda se acuerdan de que tienen que hacer su trabajo "con imparcialidad y objetividad", como dice ahora Le Monde en su editorial. Pero eso dura lo que un chaparrón de verano, apenas nada. Veremos cómo tratan el Acto X del sábado que viene. Y si publican fotos como ésta, tan esclarecedora como las anteriores que os he puesto.


Tras el Acto IX el movimiento está pareciéndose a un pequeño terremoto. Aún no derriba edificios, pero los hace tambalear. Por primera vez desde que comenzó la revuelta, 250 académicos han firmado un manifiesto de apoyo a las reivindicaciones de los "chalecos amarillos" y lo han hecho con un titular sorprendente por lo directo: "No seremos los perros guardianes del Estado". Y dicen lo obvio, entre otras cosas: "Los medios de comunicación han ayudado al poder a silenciar un movimiento popular que sí, es inclasificable como lo fue mayo de 1968 y como cualquier otro evento histórico digno de ese nombre. Queremos ayudar a romper este silencio, afirmando públicamente nuestra solidaridad con los "chalecos amarillos" e invitando a académicos, intelectuales y artistas a unirse a ellos".

El Lince

sábado, 12 de enero de 2019

Sobre la violencia...

… y quién la ejerce y sobre quién. Francia, el paradigma de la "democracia" y sus valores, la Francia que dice que va a proteger a los kurdos (y los kurdos aceptan), la Francia que quiere "reformar" la Unión Europea.

El sistema capitalista está siendo atacado en Francia por los "chalecos amarillos", un movimiento transversal y autónomo -sin dirección ni vínculos políticos- que está poniendo contra las cuerdas todo el sistema capitalista europeo y más allá. Francia, junto a la India, son hoy los dos grandes focos de resistencia contra el poder global.

Mi amiga Danielle me manda un vídeo tan esclarecedor como escalofriante, un vídeo que las mentes enfermas de los "progres" y su interiorización del discurso sobre la violencia y quién la ejerce deberían no sólo ver, sino distribuir y difundir. Lo curioso del caso, y lo que le da relieve, es que está elaborado por una televisión lo que indica que si los medios de propaganda lo abordan es que está llegando a un nivel que sorprende tanto como asusta. Sobre todo cuando ex ministros piden abiertamente que la policía "dispare a discreción". Y toda la vieja y nueva derecha (incluyendo a quienes se dicen "socialdemócratas" y quienes les apoyan) piden apoyo "incondicional a la policía".

Se habla de "clima insurreccional" aunque todavía no es así, pero el discurso y las acciones cada vez más letales de represión son una excelente excusa para justificar una violencia policial cada vez más numerosa.

En Francia van ya 10 muertos, 12 "chalecos amarillos" han perdido un ojo por los disparos policiales, 3 "chalecos amarillos" han perdido una mano por las granadas policiales y hay un total de 2.891 heridos de todas las consideraciones. El gobierno, los medios de propaganda y sus panegiristas han dicho que estas cifras son falsas. En Catalunya ocurrió algo parecido y el poder -PP, PSOE e, incluso, un amplio sector de los "comunes" vinculados a Unidos Podemos (caso Coscubiella)- dijo que todo ello era falso, negando las evidencias.



La policía dice que "defiende la República". Lo mismo ha comenzado a decir el gobierno, que acaba de anunciar que serán "reprimidas duramente" todas las movilizaciones no autorizadas y no comunicadas previamente a la policía y anuncia que 80.000 policías serán desplegados en toda Francia "para mantener el orden". El ambiente de miedo es palpable, pero la resistencia sigue. Las plataformas para recaudar dinero en favor de los heridos han sido cerradas (como ocurrió en Catalunya con las páginas web pro-independentistas), las condenas por participar en piquetes que impidieron el paso a una refinería han sido de seis meses a un año (en el Estado canalla hay gente condenada por lo mismo). En al menos dos ciudades, Reims y Bourges, se ha prohibido la manifestación de hoy en el casco urbano...

El ministro del Interior dice que cualquiera que participe en el Acto IX, que está convocado para hoy, "será cómplice de la violencia"....

El Lince

martes, 8 de enero de 2019

La fiebre amarilla

Lo reconozco, tengo la fiebre amarilla. La de los "chalecos amarillos" franceses. Es todavía una revuelta que ya ha cumplido su segundo mes, ha entrado en su novena semana. Una revuelta que poco a poco va entrando en un camino revolucionario, en un rechazo frontal contra la conducta liberal y globalista de una élite corrupta y depredadora.

Este sábado pasado ha tenido lugar el Acto VIII, la octava movilización y han ocurrido tres cosas relevantes: la primera, que ha habido mucha más gente que en las dos precedentes, recuperándose la gente tras las navidades; la segunda, que los manifestantes arremetieron contra un alto cargo del gobierno en su despacho y tuvo que salir escoltado; la tercera que un ciudadano -boxeador profesional, eso sí- se enfrentó con los puños a la policía en un ejercicio claro de autodefensa.

La movilización no decae, se mantiene y se radicaliza cada convocatoria. El hecho de que ya se esté atacando a los responsables directos del poder pone de los nervios, y de qué manera, al sistema y a sus panegiristas. El hecho de que un ciudadano se haya atrevido a plantar cara de esa manera a la policía indica que cada vez hay menos miedo y más decisión colectiva de autodefensa. Mi amiga Danielle me hace una relación de las ciudades donde hubo enfrentamientos con la policía: París, Caen, Perpignan, Dijon, Lyon, Tours, Beauvais, La Rochelle, Toulon, Montpellier, Epinal, Burdeos, La Mans, Lille, Besancon, Saint-Étienne, Cherbourg, Sain-Nazarie, Nantes, Valenciennes, Toulouse...

El sistema es consciente de lo que está pasando y ya no se corta un pelo. Si al principio procuró desprestigiarlo (primero, riéndose de "los palurdos"; segundo, diciendo que era de "extrema derecha"), ahora ya no oculta su miedo y habla claramente de "agitadores que quieren la insurrección". No, aún no pero todo se andará y el camino está cada vez más y mejor trazado. Aunque aún no hay un movimiento muy estructurado.

Lo que está sucediendo en Francia tiene un relieve sorprendente en Europa. Comienza a ser uno de los desafíos más radicales, más profundos y más dinámicos en décadas tanto en términos de método (movilización masiva y su forma de aparecer) como de demandas que ya cuestionan directamente el régimen político y social. Y lo más importante: por la relación que manda Danielle, es un movimiento distribuido uniformemente por toda Francia.

Los "chalecos amarillos" tienen un impacto que va más allá de Francia y lo que con ellos ocurra tendrá una importancia crucial y vital, a corto, medio y largo plazo, para el surgimiento de un movimiento emancipatorio en Europa contra la plutocracia. Su victoria o su derrota nos afectará sin duda.

El pasado sábado, el Acto VIII, mostró un movimiento más masivo y radical que en otras ocasiones y eso pese a los desesperados intentos del poder (político, económico y mediático) de dividir al movimiento y minusvalorar su presencia. No lo logró, pero sí está utilizando la gesta -porque es una gesta- del boxeador enfrentándose a la policía para insistir en el consabido relato sobre la "violencia". Fiorina, que ha perdido un ojo por disparos policiales, y otros heridos se están sonriendo sarcásticamente, con su mandíbulas rotas, y responden de forma clara sobre quién la ejerce.



Cada vez hay más policías de paisano apaleando a los manifestantes. Sin rubor, sin identificaciones, atemorizando. Fijaos en el de la careta blanca y el brazalete rojo. Os lo amplío.


Sobran los comentarios. Esta gentuza habla de forma abierta de que está "defendiendo la República". ¿De quién, de la gente sin trabajo, sin perspectivas, sin futuro? Y luego hablan de que se les odia. El boxeador está siendo agredido, procesado, de todo. La campaña en las televisiones contra él es brutal. Pero la policía es defendida. Mirad.


La policía "defiende la República". El boxeador, la ataca. 


Aquí, en el Estado canalla (más conocido como España) estamos entretenidos con el fascismo de Vox y su ataque al feminismo. En el movimiento de los "chalecos amarillos" las mujeres son predominantes y tremendamente activas. Ante la incultura general, tal vez haya que recordar lo que dijo un comunero, de la Comuna de París, en 1876 (y ahora, poneos a criticar el lenguaje por no ser políticamente correcto). Ese comunero se llamaba Jules Valles, uno de sus dirigentes: "Mujeres por todas partes. Gran señal. Cuando las mujeres se involucran, cuando la ama de casa empuja a su hombre, cuando saca la bandera negra que flota en la maceta para plantarla entre dos aceras, es porque el sol se levantará en una ciudad en revuelta".


El Lince

viernes, 4 de enero de 2019

Poesía en la luna

La cara oculta de la luna ya no es sólo de Pink Floyd. Ahora, también es de China. El mundo se ha sorprendido y, al mismo tiempo, Occidente se ha sentido un poquito más insignificante. El paso dado por China es de gigante, otra vez. Pero ¿os habéis preguntado qué significan los nombres de la nave y del vehículo espacial? Chang'e-4 (lo que significa que hay otros tres anteriores) y Yutu-2. El tres y el uno, respectivamente, ya estuvieron en la luna en 2013-en la cara que vemos desde la Tierra- en la misión experimental con la que se ha preparado ésta y que se inició en 2004. Chang E es el nombre del proyecto de exploración lunar de China. Primera foto, el Chang'e-4, segunda, el Yutu-2.



Chang E es la mujer de la luna en la mitología china. Yutu es su conejo de jade. Poesía pura. Entreteneos en buscar la historia de Chang E, porque hay al menos tres leyendas sobre ella aunque es como la mujer de la luna como más se la conoce. De hecho, en China hay una celebración con pasteles que la recuerda el 15 de agosto.


Ese día es costumbre comer yuebing (torta de luna, literalmente), dulce y deliciosa, entre toda la familia, que se junta un poco como se suele hacer en el occidente cristiano en el 24 de diciembre con la navidad. Se venden en unas maravillosas cajas metálicas.


El hito de China alcanzando la cara oculta de la luna es histórico, como ha querido enfatizar con los nombres elegidos para su proyecto. El aterrizaje se ha programado para que el vehículo funcionase con energía solar para al aterrizaje, ya que ha tenido que ser casi vertical debido a la zona donde lo ha hecho.

Pero ha sido otro más, el más sonado sin duda, de un programa espacial que en 2018 supuso 37 lanzamientos exitosos y uno fallido, más del doble que en 2017 que fueron 18 lanzamientos. Toda una demostración de la capacidad de expansión de China en aspectos civiles, comerciales y militares y la constatación de que tiene planes muy serios a largo plazo para el espacio. Esta cifra significa que ha sobrepasado, con mucho, a Rusia y a EEUU en lanzamientos espaciales durante el año pasado. Bien es cierto que está muy por detrás de estos dos países, pero a medio plazo estarán a la par.

Y ya que hablo de esto, otro dato: el año que acaba de terminar lo hace con la incorporación de otros 6 países al Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras (BAII): Argelia, Ghana, Libia, Marruecos, Togo y Serbia. Esto hace un total de 93 países los que forman ya la alternativa clara al FMI puesto que concedió el año pasado, entre otros, préstamos a India, Turquía y Egipto en condiciones más ventajosas que las que suele ofrecer el Banco Mundial o el propio FMI.

El Lince

miércoles, 2 de enero de 2019

El régimen del 78



Singular y acertada viñeta de la CUP para recordar lo que ha sido el año 2018 (y precedentes en este régimen del 78) en el Estado canalla (más conocido como España). 

Explicación para quienes lo veis desde fuera: es el remedo de una icónica viñeta cómica y ácida muy conocida durante el franquismo titulada "13, Rue del Percebe". De arriba a abajo:

- Buhardilla y azotea: a la izquierda, la especulación con el alquiler de pisos turísticos, que está destrozando las ciudades, con plataformas como Airbnb (poned cualquier nombre en vuestra ciudad, aquí se habla de Barcelona); a la derecha la policía haciendo de las suyas contra activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Los carteles no hace falta comentarlos, ni tampoco los que aparecen en las antenas de televisión.

- Franco muerto y la monarquía, la iglesia y sus sucesores recibiendo el testigo. En el piso de al lado los presidentes del post franquismo, con los dirigentes sindicales de CCOO y UGT viendo tan campantes y satisfechos el juego que se traen. En el rellano, animales cazados por la monarquía con el presupuesto ciudadano.

- Principales banqueros y empresarios dándose un festín (y los buitres) con la Constitución española, las facilidades que les otorga y las puertas giratorias con que compran a los políticos. En el piso de al lado, los principales casos de corrupción bajo la sombra de Aznar e incluyendo a Jordi Pujol. En el rellano, el yerno del Borbón y su hija forrándose a costa del presupuesto ciudadano.

- Alemania y el FMI desvalijando a una familia gracias a la reforma constitucional exprés, esa que dicen que no se puede hacer, del artículo 135 que permite el saqueo de las conquistas sociales (los mal llamados recortes) y su posterior privatización, realizado con la inestimable colaboración policial, para variar. Al lado, los violadores de "La Manada" y los jueces que dieron crédito a su versión en contra de la de la víctima. En el rellano, más policías, en este caso la militarizada Guardia Civil, con más jueces y nazis en buena compañía deteniendo activistas.

- Abajo, la policía reprimiendo el referéndum de autodeterminación en Catalunya del 1 de Octubre de 2017; los presos y presas políticos por haber organizado las votaciones (y carteles en la pared de documentales censurados, grupos musicales procesados, montajes policiales y periódicos cerrados); la portería de todo el edificio, con Rajoy yéndose y Sánchez muy ufano en la portería; Villarejo (un comisario policial) y Felipe González, ex presidente, expertos en las cloacas de la guerra sucia mientras la gente sale a la calle en defensa de las pensiones, de la sanidad pública... e intenta derribar este régimen del 78. Y fuera de todo, los inmigrantes intentando saltar la valla de Ceuta.

El Lince