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martes, 4 de junio de 2024

Los dientes del tribalismo

Este fin de semana han ocurrido tres cosas importantes: las elecciones en Sudáfrica y México y la decisión de Occidente de ir a por todas contra Rusia (y, de rebote, contra el resto del mundo).

La tercera guerra mundial ya se está librando a gran escala, con un Occidente cada vez más desesperado y con el resto del mundo viendo hasta qué extremo puede llegar tanta desesperación por evitar la pérdida definitiva de la hegemonía colonial. Un ex asesor de Carter cuando era presidente lo ha definido de forma rotunda: "la OTAN coquetea con la guerra y la extinción", es decir, que la paliza que Rusia está dando a la OTAN es de tal calibre que estamos a las puertas de que el "coco" con que siempre ha amenazado Occidente se quede en eso, en un "coco", algo mítico y arcaico que no es real. Solo le queda a Occidente ir a la guerra abierta, y entonces será destruido sin remedio. Así que bienvenido sea porque, parafraseando actualmente a Catón el Viejo, "Occidente debe ser destruido".

Lo más importante de todo ello han sido las elecciones en Sudáfrica, donde el tribalismo blanco (pro-occidental, pro-estadounidense y pro-israelí) ha demostrado que todavía cuenta con un importante apoyo y que los blancos, principalmente africaner, siguen defendiendo a toda costa, y sin tapujos, sus privilegios; unos privilegios que ni Mandela se atrevió a cortar. Pero lo mismo se puede decir del tribalismo negro, donde los zulúes han votado en bloque como zulúes, sin importarles el resto de la población negra. El CNA reformó la ley electoral en un intento de mejorar sus relaciones con Occidente, puesto que esta era una de las exigencias occidentales, para "dar más poder a las provincias", y eso ha sido aprovechado tanto por los blancos, sobre todo por los blancos, que mayoritariamente viven en la zona de ciudad del Cabo, como por los zulúes. Sin esa reforma ni unos ni otros habrían obtenido los resultados que han logrado.

Una nota: utilizo el término tribalismo porque es evidente en el caso de los blancos (incluso utilizando un discurso claramente racista, muy en la línea del apartheid), aunque en el de los zulúes se podría hablar, en condicional, de nacionalismo aunque con muchos matices.

Mal asunto. El que el Congreso Nacional Africano haya perdido su mayoría absoluta tiene repercusiones que van más allá de Sudáfrica, con los BRICS en el horizonte. Esta derrota hay que interpretarla en tres vertientes: una técnica, otra política y otra étnica. Las dos primeras son resolubles, la última no. Aquí es donde está el problema.

La técnica es que el aumento de la abstención ha sido determinante para que el CNA esté en esta situación, y eso tiene que ver con la crisis económica, con la corrupción y con los privilegios. El considerado país más rico de África tiene amplias zonas donde la luz eléctrica no llega a las 4 horas diarias, donde las diferencias en los niveles de vida son extremos (con los blancos en la punta de la pirámide), donde los inmigrantes están rompiendo todos los estándares económicos y debilitando a los sindicatos dado que se venden por nada y están abaratando la mano de obra hasta extremos similares a los existentes en el apartheid, y eso está provocando un gran aumento de la violencia.

La política tiene que ver con todo lo anterior, añadiendo que la corrupción campa a sus anchas y que las diferentes tendencias del CNA (como en todas partes, hay una derecha y una izquierda dentro del partido) no han sabido o no han querido atajar por aquello de ser "una fuerza centrista bien equilibrada". Y con excepción de la política exterior, en la interior es el ala derecha del CNA quien controla. Un ejemplo: el gobierno ha "indultado" a la petrolera Shell de tener que acatar un fallo del Tribunal Supremo que le impedía seguir arrasando lo que en Sudáfrica se conoce como "Costa Salvaje" desde 2014. Por cosas como estas ha perdido las elecciones.

Esto les ha estallado en la cara, puesto que uno de sus integrantes, el ex presidente Jacob Zuma, ha sido quien ha dado el golpe mortal al CNA dado que ha arrasado entre el pueblo zulú, del que es integrante. Zuma, quien fue presidente del país hasta 2018, fue expulsado del partido por corrupción, y ahora se ha vengado. Aunque también hay que decir que hubo una sorda lucha por el poder y esas acusaciones de corrupción, aun teniendo visos de certeza, hay que enmarcarlas ahí y en el hecho de que Zuma representaba a la línea izquierdista del CNA.

El partido de Zuma se llama "Lanza de la Nación", nombre que tenía el brazo armado del CNA durante la lucha contra el apartheid. Y eso ha sumado mucho porque ha recogido, fuera de la población zulú, bastantes votos de quienes consideran que el CNA ha hecho demasiadas concesiones a los blancos desde que se desmanteló el apartheid. La pregunta es si ahora el LN actuará teniendo en cuenta estos apoyos no zulúes o se seguirá centrando única y exclusivamente en este pueblo. Una pista la puede dar que en su confuso programa habla tanto de nacionalizar bancos y expropiar tierras como de "fortalecer el alma zulú". Ha tenido 2'3 millones de votos, mientras que el CNA ha perdido 3'6 millones. Es evidente cuál ha sido el factor principal de la derrota.

Queda lo último, la cuestión étnica. Lo que fue el CNA durante mucho tiempo, una organización de toda la población negra, independientemente de su nación o tribu, ahora ha saltado por los aires porque, aparentemente, ya no hay manera alguna que haga que los zulúes vuelvan a confiar en el CNA salvo un cambio en la correlación de fuerzas internas en el CNA entre derechistas e izquierdistas. Y eso dificultará, y mucho, el próximo gobierno del CNA, al que plantearán condiciones similares a las que plantean los blancos, tan bien cuidados durante 30 años y que ahora han subido un pelín más... por el voto derechista negro y el apoyo masivo de los asiáticos.

El CNA lo tiene muy, pero que muy difícil a nivel interno y lo único que puede unificar a las diferentes formaciones que han salido de su seno es la política exterior. Porque otro partido salido de su seno hace ya mucho tiempo (está liderado por quien fue el responsable de las juventudes del CNA) es el "Luchadores por la Libertad Económica", con una gran implantación entre la juventud negra sobre todo. Las diferencias económicas entre el CNA y el LLE son abismales (entre otras cosas, porque el LLE aboga por una especie de nacionalización de las propiedades en poder de los ricos blancos para repartirlas entre los sectores negros más pobres).

Por lo tanto, aquí entran los BRICS, donde también hubo una pugna interna dentro de las dos tendencias del CNA cuando el año pasado se celebró la cumbre de los BRICS en Sudáfrica y hubo sus más y sus menos con la detención de Putin si iba. Las presiones occidentales fueron de tal calibre que estuvieron a punto de hacer saltar las costuras internas del CNA, por lo que Putin acudió en su ayuda al decidir que no asistiría pese a que el CNA había dicho inicialmente que lo podía hacer.

El CNA ha contado con el apoyo desde fuera del LLE en este tema y en la denuncia contra el IV Reich sionista, antes conocido como Israel, por genocidio. Por lo tanto es probable que sea en este partido en el que el CNA se tenga que apoyar, aunque de forma esporádica y solo en estos aspectos de política exterior. Por lo tanto, es creíble que haya continuismo en la política exterior, que no haya cambios en estos dos aspectos cruciales a nivel geopolítico, aunque la alianza entre estos dos partidos, por coyuntural que sea, no garantiza la mayoría suficiente para sacar adelante las cuestiones dado que aún les faltarían tres votos para ello. Tendrán que echar mano de alguno de los otros 14 partidos pequeños que controlan 57 escaños en total, casi todos ellos también con raíces e intereses étnicos, incluidos los blancos.

A priori parece que las cosas tanto con los BRICS como con el IVRS seguirán igual y que nada cambiará sustancialmente. Si hubiese un cambio, producto de un acuerdo entre el CNA y los blancos, sería una obra maestra de Occidente, que habría logrado debilitar una de las estructuras importantes de los BRICS y del respeto al derecho internacional. Porque en estas elecciones los blancos no se han cortado un pelo: unas semanas antes de ellas, su principal dirigente visitó el país 404, antes conocido como Ucrania, y reiteró su rechazo a apoyar al gobierno en la denuncia contra el IVRS en la Corte Internacional de Justicia. Algo más que un síntoma. 

P.D.- La ONU ha revisado 5.000 fotografías y 50 horas de video y audio del 7 de octubre -la audaz operación de la resistencia palestina- y determina que no hay evidencia de violencia sexual. Por lo tanto, las famosas "violaciones masivas", que también recoge la Corte Penal Internacional, no han existido. Lo mismo pasó con los bebés decapitados.


No esperéis ver nada de esto en la mierda que cotidianamente muestra el estercolero mediático occidental. Si en algo estimáis vuestra higiene mental, evitad el estercolero.

El Lince

lunes, 17 de julio de 2023

La mafia occidental no perdona

Es sabido que la mafia castiga con la muerte la salida del clan. África se ha rebelado contra Occidente, sobre todo con la apuesta por la desdolarización y la delegación de paz en el conflicto del país 404, antes conocido como Ucrania, y Occidente y sus "valores" han iniciado el castigo. Nadie se puede salir del redil, y mucho menos unas colonias que siempre han proporcionado los mejores esclavos. La mafia occidental no perdona.

A Sudáfrica se la ha amenazado ya abiertamente con sanciones económicas si accede a que Putin asista en persona a la cumbre de los BRICS de agosto, pese a que el gobierno sudafricano había otorgado inmunidad diplomática a los participantes en el mismo. Y aparecen los timoratos, como el vicepresidente del país, que le pide a Putin que no asista para no ser sancionados porque "no podemos correr riesgos financieros". Mal asunto para Sudáfrica, porque si queda bien con Occidente por miedo a las sanciones pierde todo su aura "antiimperialista" además de hacer un daño irreversible a los BRICS. Salvo que Putin a última hora decida echar una mano a Sudáfrica ausentándose, por aquello de "me debes una", la cosa está así en este momento.

La lucha de poder dentro del Congreso Nacional Africano está en su punto álgido entre el ala derecha y el ala izquierda. Tienen miedo y en vez de avanzar no tienen en cuenta que el vacío que pueda dejar Occidente es fácilmente reemplazable por los BRICS como tales y, sobre todo, por China y Rusia particularmente. Y ahí está la sexta columna, los pro-occidentales de siempre, calentando motores contra el gobierno.

Como en Kenia. Su presidente (que no lleva un año en el cargo) está siguiendo el camino de Gadafi con la desdolarización y una semana después de proponerlo comenzaron en el país las manifestaciones de la oposición pro-occidental, encabezada por el perdedor de las elecciones de hace menos de un año y quien dice ser "primo de Obama" (y parece que algo de esto hay, porque Obama le visitó una vez) y que se opone al "giro en política exterior" del gobierno. En las manifestaciones, supuestamente contra la corrupción y el aumento de impuestos, se grita "quien no salte es Ruto" (nombre del presidente del país). Hay que decir que Ruto ha heredado un país en ruinas y que está intentando salir del estrangulamiento diversificando las relaciones políticas y, sobre todo, impulsando la desdolarización y evitando el "encadenamiento al FMI" apostando por el Afreximbak.

También está Etiopía, que acaba de solicitar su membresía oficial a los BRICS (29 de junio). Una semana después, el 6 de julio, EEUU amenazó públicamente a Etiopía: "no nos quedaremos de brazos cruzados frente a los horrores en Tigré”. Después de un tiempo de silencio, EEUU revive el conflicto, y eso no es casualidad.

Tampoco falta lo esperpéntico, por supuesto. El Fondo Internacional para la Conservación de la Naturaleza ha hecho un llamamiento "para salvar la naturaleza de África de la influencia destructiva de los mercenarios rusos" (?). Que Occidente (léase en este caso Francia de forma preferente) saquee y confisque los recursos de países como Burkina Faso, Malí o la República Centroafricana no es relevante para esta peña. Ya estoy viendo a Greenpeace o a Greta Thunberg sumándose a esta denuncia y protestando.

Dado que voy a estar unos días fuera, voy a relajar un poco la cosa a la espera de ver cómo responde Rusia al enésimo traspaso de sus "líneas rojas" con el ataque al puente de Crimea. Las pruebas de la participación occidental son evidentes, como demuestra este gráfico del vuelo de aviones de la OTAN de un día antes. Y se produce, además, el mismo día en que expira el "acuerdo de granos" que no ha servido para que Rusia exporte ni una tonelada de fertilizante, algo que estaba en el acuerdo como reconoce la ONU en su intento para que se renueve. Lo más probable es que el ataque al puente se haya hecho utilizando como cobertura uno de esos barcos, aparentemente civiles, y que se haya hecho con los datos de estos vuelos.

Los rusos han prometido una y otra vez "ataques a los centros de decisiones", pero los han hecho con cuentagotas. Y veremos si cortan el acuerdo o vuelven a lo de siempre, a las "líneas rojas". Al final, el villano va a tener razón.

A lo que iba con lo de la relajación para estos días, si es que la cosa no escala más.

Comienzo con un funeral, que no es para festejar según la cultura occidental pero sí en otros países. Es el de Stella Chiweshe, pionera, feminista y luchadora de Zimbabue.


Causó un terremoto cuando se atrevió a tocar un instrumento que, hasta ella, solo tocaban los hombres, la mbira, un instrumento que tiene más de 1.300 años. Causo un terremoto cuando se enfrentó a la administración colonial británica porque reivindicaba "los sonidos ancestrales" y eso iba en contra de "los valores cristianos", por lo que Gran Bretaña, la potencia colonial, la persiguió y prohibió actuar. Pero lo hizo de noche, de forma clandestina por todo el país, y recuperó su cultura musical, su historia y añadió letras modernas a una música ancestral: hablaba de misterios, del patriarcado, del dominio colonial. No solo tuvo que pelear contra los colonizadores británicos (que pusieron al país el nombre de Rodesia), sino que más de una vez fue rechazada por las propias mujeres de Zimbabue por "romper los valores tradicionales" y por "equipararse a los hombres" al tocar la mbira.

Uno de sus temas, "Chachimurenga" ("Es la hora de la revolución") rompió fronteras de todo tipo: políticas, sociales, culturales. Porque, sobre todo, es una llamada a las armas para derrotar al colonialismo. 

Entró en un ámbito exclusivo de los hombres y terminó siendo su referente con canciones como esta. Su música se convirtió en "la sangre" de todos los luchadores de Zimbabue, Sudáfrica y Namibia. Lástima que gente como el tipo de Sudáfrica del que hablo antes esté olvidando sus raíces y su cultura tan arduamente labradas por personas como Stella Chiweshe. Seguro que la considera, en el mejor de los casos, una vieja pasada de moda en vez de una ambuya, una abuela firme y audaz que se sirvió de la música para difundir cuestiones relacionadas con la tradición, las mujeres y los problemas sociopolíticos y económicos del África negra.

Junto a ella, y de sur a norte de África, dos argelinas por aquello de que Argelia ha pedido tanto el ingreso en los BRICS como en la OCS y, por ahora, no está siendo amenazada por la mafia occidental porque Argelia tiene algo que es muy necesario: gas. 

Una reivindicado su país cuando se está fuera y, sobre todo, a su ciudad. Es Mona Boutchebak y su "Fi qalbi Sekna" ("Argelia en mi corazón todavía").

Otra hablando de amores y desamores, pero con alegría (esta es una canción de desamor) y dando una clase magistral de cómo se toca el darbuka, el tambor emblema del Poniente (Magreb) y del Levante (Mashrek). Es Souad Massi y su "Tallit al bir" ("Miro el pozo").

Occidente nunca entenderá cosas como estas, aunque asista a conciertos de quienes aquí aparecen. Para los occidentales no deja de ser una curiosidad exótica más.

A disfrutar.

El Lince

lunes, 19 de junio de 2023

 Tiempo de comedia, tiempo de tragedia

En un principio, la cosa no es para reírse: una delegación de países africanos, en representación del continente, ha visitado el país 404, antes conocido como Ucrania, y luego Rusia en un afán por plantear una misión de paz (16-17 de junio). La delegación, con notorias ausencias de última hora como los presidentes de Egipto, Uganda y Congo, está compuesta por los presidentes de Sudáfrica, Islas Comoras, Senegal y Zambia junto a representantes a nivel de ministros de Exteriores de los países mencionados antes. Si hay que tener como referencia la famosa votación en la Asamblea General de la ONU de la que tanto le gusta hablar al Occidente colectivo, Sudáfrica y Senegal se abstuvieron, Egipto y Zambia votaron en contra de Rusia y Uganda y Congo no participaron. Luego, en sí, era en su origen una delegación completa, con todos los puntos de vista.

Las razones del por qué de esta división de última hora no están claras para mí, aunque tan vez tenga que ver con el intento de Sudáfrica de enmarcar la mediación tanto como un asunto interno como externo.

Me explico: Sudáfrica está bajo presión occidental desde que los bufones de la Corte Penal Internacional emitieron la orden de arresto contra Putin por "crímenes de guerra". Desde entonces EEUU y Gran Bretaña han amenazado en repetidas ocasiones al país con sanciones si no se aleja de Rusia, especialmente desde que Sudáfrica resistió las primeras presiones sobre la CPI otorgando inmunidad diplomática a los participantes en la cumbre de los BRICS de este agosto próximo. Incluso se ha llegado a decir expresamente que Sudáfrica "pone en peligro" un comercio de 32.000 millones de dólares con EEUU de seguir así. En palabras del presidente sudafricano, "Sudáfrica está bajo una extraordinaria presión occidental", y con esta iniciativa se muestra equidistante, ni con unos ni con otros. Es un intento de aliviar la presión, pero la mafia occidental no cejará en su chantaje ni en sus amenazas.

Hasta aquí, casi normal todo. Pero...

La delegación llega a Varsovia para, desde allí, trasladarse a Kiev (día 16). Y empiezan los problemas. Para unos, "un percance desagradable", para otros un "acto de racismo": no se dejó bajar del avión a las escoltas de las delegaciones. "Incumplimiento de los procedimientos estándar de entrada", según Polonia, porque "había materiales peligrosos en el avión" además de "personas de las que la parte polaca no había sido informada de antemano". Mentira, según Sudáfrica. "Desde hace dos semanas se lleva hablando con Polonia de este viaje, y se cumplieron todos los trámites necesarios para la entrada de la delegación en Polonia y los permisos de transporte requeridos”. La conclusión: "están poniendo en peligro la vida de nuestro presidente".

Los escoltas se quedaron, la delegación salió, pero mermada, en tren hacia el país 404. Tal vez os preguntéis por qué en tren. La respuesta es fácil: es legendaria la pericia de la "defensa aérea" neonazi, por lo que ir con un avión, y además no muy amigo, tiene sus inconvenientes. De hecho, los escoltas -y los periodistas africanos- no han podido viajar a Rusia porque Polonia no ha dado el permiso de salida. Han estado todo el tiempo, 26 horas en total, retenidos en el aeropuerto.

 Y al llegar a Kiev esta delegación mermada empezó el tiempo de la comedia: que si ataques rusos con misiles (que, por supuesto, fueron derribados), sirenas de alarma aérea, etc. Uno de los mentirosos patológicos del país 404, que ejerce de ministro de Exteriores, lo dijo y, como es habitual, lo repitieron como loros los medios de propaganda occidentales.

Solo que a alguien, que supuestamente era protagonista al ser parte de la delegación africana, no le gustó su papel en la comedia. Ya la cosa había empezado a mosquear cuando en el viaje turístico a Bucha, para "comprobar las atrocidades rusas", el presidente sudafricano pidió "una investigación internacional sobre las supuestas atrocidades". Decir esto en el país 404, y en el Occidente colectivo, es de valientes. Porque añadió que "no solo basta con escuchar a la parte ucraniana, hay que hacerlo también con la rusa".


Pero nuestro hombre en cuestión fue más allá y lo trasladó a su país, y de ahí a toda África. Conclusión: escándalo en el continente africano porque esto se ha replicado en todos los países que componen la delegación de paz.

"Desinformación deliberada". Cómo se nota que este hombre es diplomático porque tendría que haber dicho, lisa y llanamente, la verdad: todo fue una farsa, de la que se hicieron eco, como siempre, los medios de propaganda occidentales. Es lo habitual. Pero fijaos en lo que dice un poco más arriba: “Esperábamos que esta misión no fuera fácil, pero algunos de los obstáculos que se nos han impuesto causan una gran preocupación, como la forma en que nos trataron, y otros se veían divertidos, como esta supuesta explosión”.

Por lo tanto, ya os podéis hacer una idea de cómo fue el tránsito de la delegación africana por el país 404 y lo que salió de allí: nada. Teatro, y del más malo. Porque el neocolonialismo no duerme, ni cambia, y sigue tratando a los africanos como sus esclavos. Y, además, tontos. Desde luego, hace falta ser un descerebrado, o sea, como en Occidente, para creer que Rusia atacaría la ciudad donde está una delegación de paz que iría a Rusia al día siguiente. Pero todo esto es lo que consume esta gente inculta y atrasada occidental donde pensar es muy, pero que muy raro.

Este es un ejemplo, otro más, Y van...

Esto se publicó, sin vergüenza alguna, el sábado. Y eso que hay cientos de fotos y vídeos con estos vehículos "indestructibles" ardiendo en estas dos semanas de "ofensiva" de los neonazis, y aquí he puesto algunas. En fin, Occidente no tiene remedio (salvo con una lobotomía a gran escala).

O esta delirante historia de un paranoico, otro, donde dice que lo que vemos son dobles de Putin porque el original está escondido y asustado porque "Ucrania gana". Fijaos también en la fecha, del sábado pasado.

Rectifico: Occidente es irrecuperable, ni siquiera con lobotomía.

Siguiendo con la delegación, en síntesis, el plan de paz africano es:

- Lograr la paz a través de la diplomacia a través de negociaciones;
- Las negociaciones de paz deben comenzar lo antes posible;
- Desescalada del conflicto por ambos lados;
- Asegurar la soberanía de los estados y pueblos de acuerdo con la Carta de la ONU;
- Garantías de seguridad para todos los países;
- Asegurar el movimiento de granos y fertilizantes por parte de ambos países;
- Apoyo humanitario a las víctimas de la guerra;
- Solución de la cuestión relativa al canje de prisioneros de guerra y la restitución de niños;
- Reconstrucción de posguerra y asistencia a las víctimas de la guerra;
- Interacción más estrecha con los países africanos.

Es decir, son propuestas que se acercan bastante al plan de paz chino y, por lo tanto, parcialmente aceptables para Rusia, pero completamente inaceptables para la mafia occidental. Lo importante es que el Sur Global se está moviendo y rompe de forma clara con el neocolonialismo occidental.

La estancia en Rusia (día 17), en contraposición a cómo se trató a la delegación africana en Polonia y en el país 404, fue de respeto absoluto y trato de tú a tú. Putin hizo algo inusual: enseñó a la delegación africana el documento que Rusia y el país 404 firmaron en marzo de 2022 en Estambul bajo el patrocinio de Turquía y que no se aplicó por las presiones británicas y estadounidenses a los neonazis. "Aquí está este documento. Y fue rubricado por la delegación de Kiev. Pero después de que nosotros, como prometimos, retiramos las tropas de Kiev, las autoridades de Kiev, como suelen hacer sus amos, lo tiraron todo al basurero de la historia. Digámoslo así, de forma clara e inteligente", comentó Putin. Es decir, rebatía todo lo que han dicho los neonazis y sus mentores occidentales.

Más aún, el documento recoge que Gran Bretaña, China, Estados Unidos, Turquía, Francia y Bielorrusia eran los garantes de seguridad de Ucrania en el Tratado de Estambul. Se le había denominado Tratado de Neutralidad Permanente y Garantías de Seguridad de Ucrania y en él ell país 404, antes conocido como Ucrania, conservaba Jersón y Zaporizie, segregándose solo las repúblicas de Donestk y Luganks.

Está claro que se dirá lo de siempre, que Putin miente, que... Sin embargo, nada más incumplir los neonazis del país 404 este acuerdo, en abril comenzaron a llegar las "wunderwaffen", las armas maravillosas con que Hitler soñaba para ganar la guerra al igual que ahora sus herederos (OTAN y EEUU). Esto no es casualidad e indica que desde el primer momento Occidente apostó por la guerra, con los resultados que ahora vemos.

Después de esto los dirigentes africanos ya saben a qué atenerse y el por qué se ha llegado a una situación que no tiene vuelta atrás y que solo terminará con la debacle occidental. Ni que decir tiene que hay que considerarlo otro engaño más a Rusia, al igual que la no expansión de la OTAN o los Acuerdos de Minsk, por lo que está claro que ya no habrá nada más que una negociación en los términos de Rusia, que serán equivalentes a la rendición nazi de 1945 si es que queda algo del país 404. Eso incluye al Occidente colectivo.

Uno de esos periodistas, ya de vuelta obligada a Sudáfrica, ha dicho que "es imposible informar con precisión sobre los comentarios de Ramaphosa y Putin sobre los eventos que se desarrollan allí (en Rusia). Dependemos principalmente de la información de la Presidencia, que no es una situación ideal". Y culpa de ello a Polonia por todo lo ya comentado.

Esto me lleva a hacer un breve análisis del por qué de esta delegación mediadora. En primer lugar, porque África tiene interés en que continúe el acuerdo de cereales entre el país 404 y Rusia, pero hay un problema: los cereales están llegando con cuentagotas (porque se los queda Occidente), no así los fertilizantes (porque no salen por las sanciones, y hasta la ONU lo ha tenido que reconocer). Ya se han exportado 31'7 millones de toneladas de productos agrícolas desde los puertos de Ucrania, pero solo el 3% de esto ha llegado a países del Sur Global. Esta es la razón por la que Rusia ha dicho que es muy probable que no se renueve el acuerdo en julio. Y esta es la razón por la que África enfrenta un serio desafío para su desarrollo, aunque Rusia también ha dicho que está dispuesta a enviar sus granos fuera del acuerdo actual. Y esto, sin duda, ayudará en el proceso de descolonización y desdolarización que está comenzando África.

En segundo lugar, la mediación es una posición muy progresista ante la postura guerrerista occidental y altera esas nociones establecidas de que África (u otros países fuera de la mafia occidental) no puede traer soluciones a los problemas globales. Eso en unos momentos en los que se está hablando de una ampliación y/o reforma del Consejo de Seguridad de la ONU adquiere una particular relevancia. 

En definitiva, África está dejando de ser el continente-colonia para Occidente.

Un dato: el presidente ruso y el sudafricano tuvieron una reunión a solas, al margen de la delegación de paz. Es evidente que hablaron sobre los BRICS, que este año preside Sudáfrica, y la cumbre de agosto.

P.D.- En Letonia ha comenzado a aparecer una muestra de resistencia partisana contra la OTAN. En dos semanas, dos vehículos militares de la OTAN que transportaban material para el país 404 han sido quemados. No hay explicación oficial de ninguno de estos incendios, por lo que cobra fuerza la primera opción. 

El Lince

jueves, 1 de junio de 2023

Todo va bien

Incluso cuando aparece una pequeña rebelión que va a escocer, y mucho: Sudáfrica acaba de anunciar que otorgará inmunidad diplomática a los asistentes a las reuniones de los BRICS que se celebrarán en el país durante el verano, incluido el presidente ruso, Vladimir Putin. Los bufones de la Corte Penal Internacional ya están ladrando. Los occidentales, encabezados por Gran Bretaña, están presionando a Sudáfrica -y amenazando con sanciones- si no cumple el mandato de la CPI y, en el peor de los casos, piden que retrase la cumbre. Veremos si Sudáfrica da marcha atrás o no, pero si lo hace le queda un telediario en los BRIC. En cualquier caso, este fin de semana hay una reunión de ministros de Exteriores de los BRICS para preparar la cumbre y se sabrá con bastante seguridad la postura definitiva de Sudáfrica.

Aunque resulta que lo que dice Sudáfrica que va a hacer es legal, según el derecho internacional, pero eso no le vale a Occidente. ¿Entendéis lo de "orden basado en reglas", o sea, su orden y sus reglas?

En sentido estricto, y según el derecho internacional, esta medida de Sudáfrica no anula la orden de arresto de los bufones, pero significa que en Sudáfrica no se producirá.

Es otra bofetada más a Occidente, a la CPI que no es más que otra de sus herramientas. Supongo que no hace falta recordar que no quiso investigar los crímenes de EEUU en Afganistán en cuanto EEUU sancionó a sus integrantes. De hecho, esto sirvió para que se cambiase todo el entramado judicial y fuesen cambiados, incorporando nuevos. El resultado es el que vemos ahora. Y Afganistán sigue sin investigarse. Y Palestina.

Mientras tanto, y en ese fantasmagórico G-7, hay otro gobierno que se tambalea. Si Alemania entró la semana pasada en recesión, Gran Bretaña está a punto de hacerlo. Los datos apuntan que lo hará este verano. Por ello, los trabajadores vuelven a la carga y se están produciendo las más masivas y multitudinarias huelgas desde la etapa de Margaret Thatcher (finales de los 80 y primeros años 90 del siglo pasado). Y con razón. 

Esto es lo que necesita para vivir a la semana una persona sola, ahora multiplicad por 4, o por 5, o por lo que queráis en función del número de componentes de una casa. Y no se incluye el gasto en vivienda ni en guarderías o medicinas, por ejemplo.

Hace un tiempo os comenté que el gobierno quiere aprobar una ley anti-huelga más dura de la que ya existe. El gobierno argumenta que solo en un año se han perdido 3'5 millones de horas de trabajo por las huelgas y que el daño al país es tremendo. Bueno, hay que salvar a los neonazis del país 404, antes conocido como Ucrania, primero. Pero la caída en el nivel de vida de los británicos está en los niveles de 2005 y los trabajadores, como en Alemania, van a por todas, con ley anti-huelga o sin ella. Mañana hay una huelga de ferroviarios, lo que dará una buena muestra de cómo se van a producir las restantes, si es masiva o no, si es reprimida o no.

El miedo está comenzando a hacer mella en el gobierno y, sorpresa, sorpresa, anuncia que estudia "el control de precios de alimentos". Es un intento desesperado de parar las huelgas, pero muestra cómo cuando ven las orejas al lobo los conservadores hacen lo que los progres tienen mucho miedo de hacer, como ocurrió en el Estado canalla, más conocido como España, ante la subida del precio de los alimentos. 

En el país 404 las cosas van como siempre: a la espera de la ofensiva de primavera, que ya se está terminando, por lo que estaremos a la espera de la ofensiva del verano (y no hay que perder de vista la cumbre de la OTAN en julio, que puede ser una buena tapadera) - de lo que hasta la revista satírica "El Jueves" se cachondea- siguen inflando historias sobre lo buenos que son los neonazis, lo bien que lo están haciendo al atacar ciudades rusas, y así. Propaganda pura, que es la guerra que siempre ganan.

Incluso hay quien dice que según el derecho internacional tienen derecho a hacerlo porque se defienden. Cuando oigáis eso por ahí, recordad entonces que la resistencia palestina tiene, por lo menos, el mismo derecho. A ver qué os responde.

Es sabido que todos, lo que se dice todos, los misiles rusos son derribados una y otra vez por la brava defensa neonazi. Pero siempre hay alguien por ahí que tiene que aguar la fiesta. Porque a pesar de todos los intentos de los defensores de la "libertad" y de los "valores democráticos" de ocultar lo que está pasando, a veces se cuelan cosas como esta.

 


Rusia dijo que había destruido una batería de los famosos, e irrisorios, misiles "Patriot" de EEUU que "protegía" el aeropuerto de Kiev. El país 404 dijo que no, lo mismo que EEUU, y que se habían derribado todos los misiles rusos, incluido uno hipersónico. Pero las imágenes satelitales -que también usan los rusos- son determinantes de que eso fue como dicen los rusos. Por cierto, si pincháis veréis que el vídeo que os ponía y que lo documentaba se ha borrado de youtube por "cancelación de la cuenta". Otra muestra más de los "valores democráticos" occidentales. Y os decía que se han apagado las cámaras de las calles y que se ha detenido a quienes hablan y/o cuelgan imágenes de los ataques. Entonces eran 6 los detenidos, ahora son 32. Todos acusados de "proporcionar información al enemigo". ¿Oís a los "demócratas" hablando de ellos?

Otra de lo mismo.



Esto es de una base en un pueblo que se llama Zhitomir. Veis que la primera fotografía es del día 20 de mayo y la segunda del 30. Como se ve, todos los misiles rusos son derribados.

Todo va bien, según Occidente, Pero lo tiene mal, muy mal. Y va a peor. Así que he decidido amenizar esto un poco con algo de música no occidental, aunque con maneras que conocemos muy bien en Occidente.

Los rusos "metálicos" Aria (mal comparados con Iron Maiden), que comenzaron durante la URSS, y su "Calle de rosas".

 

El "chino radicado en Taiwán", como se define a sí mismo, Xiangyu y su "No creo". Poned subtítulos, aunque las imágenes os dan una idea clara de lo que cuenta.

El Lince

lunes, 3 de enero de 2022

Barrer el polvo

Los tiempos cambian, nos vamos haciendo viejos. Esto lo cantaba Pablo Milanés cuando era joven y apoyaba la Revolución cubana y hoy, viejo, es un contrarrevolucionario. Pero encierra una gran verdad: el tiempo cambia y nos vamos haciendo viejos. Tal vez es porque nos hacemos viejos por lo que intentamos justificar nuestros miedos de una u otra forma. Por ejemplo, y a raíz de las dos cosas que he escrito de Chile, que el problema que tiene Boric es que el Ejército es pinochetista. Exacto, es un problema. Pero no es irresoluble.

La cuestión está en si eso se convierte en un corsé, físico y mental, o se aprovecha el momento, con una sociedad muy movilizada y con un respaldo muy importante, para coger la escoba y barrer. Nadie se ha atrevido a hacerlo. Ni siquiera el tan esperado Lula, la (otra vez) gran esperanza de los progres latinoamericanos -y más allá- por lo que dice que va a hacer ahora y por los errores que dice haber cometido antes y que ahora no haría. Uno de ellos, no tocar al Ejército, fascista y uno de los apoyos de Bolsonaro. ¿Lo va a hacer ahora? Lo dudo. Dicen que el Ejército se ha cansado de Bolsonaro, por lo que es probable que sea "neutral" ahora -o sea, como la primera vez de Lula a cambio de dejarlo todo como estaba-, pero si no se limpia de los elementos fascistas la espada de Damocles que ve mucha gente seguirá ahí. 

Los pocos que se han atrevido a coger la escoba y barrer, también en el Ejército, han sido quienes decidieron ir a por todas en su momento, Fidel y los suyos en Cuba y los sandinistas en Nicaragua. Y ahí está la historia, de cómo unos pocos, decididos, dieron la vuelta a la misma historia y a todos los miedos. Chávez, cuando encabezó el golpe en 1992, era la cabeza de una minoría. Pero fue el respaldo popular lo que le llevó a la presidencia en 1998. E hizo lo que había que hacer: purgar al Ejército. Ya había movimientos democráticos en su seno, como el suyo, el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, pero Chávez cogió la escoba y barrió el polvo. Eso está permitiendo a Venezuela resistir las presiones de dentro y, sobre todo, de fuera. Evo Morales intentó algo parecido al principio de su mandato, dando entrada en el Ejército a quechuas y aymaras, aunque se quedó en los niveles bajos de la oficialidad y no se atrevió a barrer en los altos mandos, lo que terminó pasándole factura con el golpe de 2019. En otros países, como Sudáfrica, el Congreso Nacional Africano logró que una parte importante de su brazo armado, La Lanza de la Nación, se incorporase al Ejército. En Nepal la guerrilla permitió el engaño de la ONU y sus militantes, que hubiesen debido incorporarse al Ejército, terminaron de guardabosques. Y en El Salvador, a cambio de no tocar al Ejército, se logró la incorporación de la guerrilla a la Policía. Es decir, ejemplos hay casi para todo.

Las situaciones son distintas, es evidente. Entre otras cosas, porque ya no hay (casi) guerrillas. Hoy se ha interiorizado tanto el discurso burgués de la "violencia" que todo lo que huela a violento es rápidamente desechado, criticado, destrozado. Esto me recuerda el viejo adagio de que la paz tiene dos vertientes: la negativa, ausencia de conflicto, y la positiva, resolución de las causas que generan el conflicto. La primera vertiente es la burguesa, la segunda debería ser la nuestra. Pero no, ya no lo es. Nos quedamos, y nos contentamos, con la primera y nos horrorizamos cuando alguien quema un contenedor de basuras pero no cuando a ese alguien se le arrancan los ojos (especialidad de Francia y de Chile, sobre todo) porque busca acabar con las causas que generan los conflictos.

En un contexto internacional como el que hay ahora, cualquier golpe de Estado es bastante improbable. El caso de Bolivia es excepcional y en todo momento estuvo arropado por un factor civil. Y antes de Bolivia, los golpes de Honduras, de Paraguay y del propio Brasil fueron, también, civiles aunque los militares estuviesen detrás.

Uno de los errores de Evo Morales fue desmovilizar a su gente, cuando no enfrentarse a ella como en el caso del Tipnis. Es lo que tienen los progres cuando están en los gobiernos, que rápidamente desmovilizan. Chávez lo vio claro y siempre tuvo muy presente la necesidad de estar con la gente y que la gente estuviese en la calle. También lo tiene claro el gobierno cubano. Y parece que ahora también el boliviano.

En Chile hay una situación excepcional: con la redacción de una nueva Constitución y con la gente en la calle, la oportunidad de barrer si no a todo el pinochetismo a grandes aspectos del mismo es única. Es ahora o nunca. Solo hay que atreverse a coger la escoba y barrer. Ya sé que es más fácil escribirlo desde una cómoda silla que ponerlo en práctica, pero la coyuntura es favorable. Podría echar mano de Lenin y su agudización de las contradicciones; podría echar mano de mucha otra gente e, incluso, del mismo Allende y de su error con ese mismo Ejército. La cuestión está en si se quiere hacer o no, no en que no se pueda a priori. A priori nada se puede, siempre hay quien dice que no están dadas las condiciones, que la coyuntura no es favorable, que...

Pero ahora la coyuntura sí es favorable porque el mundo ha cambiado, y mucho. Cuando la gusanera cubana pide apoyo a Europa, una de las recomendaciones que recibe es negociar con el Ejército. Cuando los escuálidos venezolanos piden apoyo a EEUU y a Europa se habla de negociar con el Ejército. Nunca se da esta consigna para cualquier otro país, por eso en Chile se debería dar la vuelta al argumento: apoyo para limpiar al Ejército de pinochetistas. Sé que no se va a producir, pero lo primero es barrer hasta donde se pueda y, en cualquier caso, dejar bien claro que se ha intentado. Escenificarlo a nivel internacional es necesario, entre otras cosas para dejar con el culo al aire a esperpentos como la OEA o a las sacrosantas "democracias" occidentales.

Mirad las reacciones de Occidente con otros golpes de Estado actuales, en 2021: Myanmar, Chad, Malí, Sudán, Guinea. Un país asiático y cuatro africanos. De algunos no tendréis ni idea porque son golpes pro-occidentales, de otros sí porque son anti-occidentales. Pero Chile no está en esos continentes y, hoy por hoy, no es factible un golpe clásico en América Latina. Por eso no se dan, se buscan otras vías como las de Honduras, Paraguay o Brasil. Incluso la de Bolivia. O la que se ha pretendido recientemente en Perú. Pero ¿cuál podría ser la excusa para un golpe en Chile con el nivel de apoyo a Boric y de movilización social que hay? ¿cuál sería el discurso occidental tras el caso fallido del apoyo a Guaidó y todo lo que han dicho sobre la institucionalidad y la democracia? Agudizar las contradicciones, eso sería lo interesante. Dentro y fuera de Chile.

Es algo que no veo. No lo veo porque ya, desde antes, los "hippies, progres y buena onda", como dicen los mapuches de la Coordinadora Arauco-Malleco, han ido posicionándose, especialmente "contra la violencia", contra todo lo que se movía en contra del sistema. Así, no han vacilado en firmar y votar a favor de la Ley Anti-protesta que criminaliza la lucha social. Eso fue en enero de 2020. Buscad por ahí de qué va esta ley y veréis. Y, por cierto, el Partido Comunista se abstuvo. O sea, votaron a favor o se abstuvieron casi todos los de Boric, incluyéndole a él mismo, que también votó a favor. ¿Miedo al pinochetismo? No me hagáis reír. El pinochetismo está metido en muchos cuerpos y en muchas mentes pretendidamente antipinochetistas de puertas afuera.

Mao lo dijo gráficamente hace mucho tiempo echando mano de un viejo proverbio chino: "Todo lo que es reaccionario es idéntico, si no se golpea es imposible hacerlo caer. Es como cuando se barre, por donde no se pasa la escoba, el polvo no se va por sí solo". De eso sabemos mucho en el Estado español, donde también el Ejército es post (o neo) franquista. Y en Francia, donde el Ejército se atreve a lanzar proclamas golpistas sin que nadie, ni siquiera la OTAN -esos demócratas de toda la vida preocupados por el "autoritarismo" ruso y chino-, intervenga para salvar la cara. Pero de ahí al golpe hay un trecho. En Chile no hay que desenmascarar nada, el pinochetismo se sabe. Por eso hay que estirar para ver hasta dónde hay que golpear. Porque se puede, y se debe, golpear.

Mucho me temo que no va a ser este el caso de Boric. Ni en esto ni en otras cosas.

Si durante la campaña no mencionó para nada su política exterior, lo que ya está haciendo es más de lo mismo. Por ejemplo, su decisión de continuar como miembro de la Alianza del Pacífico (México, Colombia, Chile y Perú) que es la contraposición derechista a la ALBA (Cuba, Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Antigua y Barbuda, Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía). No en vano no se ha privado de calificar a los tres primeros como "dictaduras". Boric dice que ya ha hablado con López Obrador (hubiese sido muy fuerte que dijese que el primero con quien ha hablado ha sido el colombiano Duque) para "revitalizarla". Mal movimiento, sin duda.

Y otro peor: hasta ahora no se manifestado ni a favor ni en contra, pero la omisión es significativa en sí, sobre las organizaciones y estructuras de los mapuches aunque sí intenta que algunos dirigentes mapuches formen parte de sus estructuras gubernamentales. En lo que en Chile se llama "direccionar" hacia las instituciones. Por ejemplo: ¿va a disolver o mantener la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena que si por algo se ha caracterizado ha sido por su enfoque colonialista al respecto? Tras el manifiesto de la Coordinadora Arauco-Malleco, algo tendría que haber salido si no de él, al menos de sus apoyos. Pero ni palabra todavía. Tal vez sea temprano, pero sí hay otras cosas de las que ha hablado ya y esta no es una de ellas, salvo generalidades. Sin embargo hay algo preocupante, muy preocupante: Boric ha dicho que está dispuesto a dialogar con los mapuches "si están por la paz". Implícitamente está dando la razón al pinochetismo cuando lleva años acusando a los mapuches de "violentos" por resistirse, por ejemplo quemando maquinaria, a las explotaciones de sus tierras. Por eso decía el otro día que el tema mapuche va a ser el termómetro que medirá la temperatura del "cambio" en Chile. 

Es muy pronto aún, no hace ni un mes de las elecciones y aún no ha tomado la presidencia, pero los movimientos suyos y de su gente no son alentadores por ahora. Nada me gustaría más que equivocarme.

El Lince

jueves, 22 de julio de 2021

La nación Arcoiris

No, no tiene nada que ver con el rollo LGTBI, tan de moda. Para nada. Lamento decir que antes de todo ello hubo alguien que habló de "la nación Arcoiris" como un concepto aglutinador de todos los habitantes de un país en concreto: Sudáfrica. Ese alguien fue Nelson Mandela cuando, tras ser liberado de la cárcel en la que se pasó casi 30 años acusado de todo, siendo los calificativos más usados el de comunista -que lo era, siendo miembro del Partido Comunista de Sudáfrica-, y el de terrorista -porque fundó una organización armada, "La Lanza de la Nación", para luchar contra el apartheid- llegó a la presidencia.

Mandela fue liberado solo después de que los blancos y sus protectores, léase EEUU y Occidente, se hubiesen asegurado que se mantendría gran parte de sus privilegios y, sobre todo, una política económica neoliberal aunque aceptando la introducción de algunos aspectos que mitigasen esa política como medidas para una reforma de la propiedad de la tierra, el combate a la pobreza y la expansión de los servicios de salud, por poner unos ejemplos. Mandela era un hombre ya muy mayor cuando fue presidente durante cinco años y no pudo hacer mucho porque el país había sido destrozado por completo. 

Cuando era un poco más joven que ahora tuve la oportunidad de hacer una entrevista a Mandela siendo ya presidente y en el marco de un viaje oficial a España. Su sencillez era espectacular, y su paciencia con un tipo como yo muy de elogiar. Me sentía bastante cohibido ante un hombre motivo de orgullo e inspiración para todos los explotados por el capitalismo pero, al mismo tiempo, un hombre que era utilizado sin rubor por la burguesía -como se había hecho antes con Gandhi- para su política de "pelillos a la mar", de "reconciliación nacional", de "diálogo", de casi una convivencia feliz entre ricos y pobres y todos contentos, y así. Y le pregunté sobre ello, así como sobre la contradicción entre lo que había defendido durante tanto tiempo (nacionalización de las minas, de los bancos, de las industrias monopolísticas) y lo que estaba haciendo el Congreso Nacional Africano en el gobierno. Me vino a decir que no habían tenido más remedio que aceptar las condiciones del FMI, además de EEUU y los países occidentales. Interprétese como se quiera esas palabras.

En cualquier caso, eso es historia mía, si se quiere. Lo cierto es que en Sudáfrica al hilo de esta política se creó una importante clase capitalista negra que incluyó a importantes cuadros del CNA y dirigentes sindicales como Cyril Ramaphosa, el actual presidente del país. Por el contrario, la inmensa mayoría de la población negra las sigue pasando canutas y eso ha supuesto que en varias ocasiones haya habido explosiones sociales y huelgas masivas que muchas veces han terminado como ahora: con una importante represión y muertos.

Tal vez me consideréis un fantasioso pero no dudo en afirmar que se ha entrado en una nueva era en Sudáfrica. Primero, porque la explosión social se produce cuando la tasa oficial de paro en el país es del 32%, y de ahí los ataques masivos a centros comerciales en todo el país. Segundo, porque la represión ha sido de una parte del CNA contra otra parte del CNA. Es decir, de los partidarios de Ramaphosa contra los partidarios de Jacob Zuma, el presidente antecesor y que tuvo que dimitir hace tres años.

Zuma fue destituido de la presidencia en 2018 acusado de corrupción. Ramaphosa lanzó una campaña de anticorrupción para justificar la destitución. Pero...

Lo que hay detrás es no solo una lucha ideológica sino una lucha política y, también, una lucha étnica. Zuma es zulú, Ramaphosa es bantú. Esto, que en la época de la lucha contra el apartheid no tenía importancia, ahora la adquiere. Porque los primeros son partidarios del restablecimiento de la independencia económica del país y la eliminación de todos los controles externos, es decir, romper con el FMI, mientras que los segundos defienden el status quo. Además, con la destitución de Zuma se inició un proceso para destituir a todos sus partidarios de los más altos cargos del CNA que terminó con la disolución de la organización de los veteranos de "La Lanza de la Nación". Es decir, que el gobierno se cargó la asociación que cobijaba a los luchadores de primera línea contra el apartheid y en la que Zuma tuvo un importante papel. Este fue uno de los desencadenantes de las protestas, por cierto.

El gobierno sudafricano ha hablado de "intento de rebelión" y que por ello se envió al ejército para reprimir las protestas, especialmente en dos provincias de mayoría zulú. No lo parece, pero sí un importante movimiento de rechazo a las políticas entregistas del gobierno. Porque a pesar de la transferencia de poder político que simbolizó la presidencia de Mandela, la propiedad de los medios de producción quedó en las manos en que estaban y a las que se añadió un pequeño y selecto grupo de nuevos dirigentes que no ha hecho más que aumentar su riqueza en detrimento del pueblo.

Tal y como yo lo veo, es un enfrentamiento entre dos ramas del CNA que se revisten de enfrentamiento étnico. La nación Arcoiris de la que hablaba Mandela ya está perdiendo el brillo de los colores y, desde luego, la situación es muy tensa por lo que intentaré volver sobre ello.

El Lince

martes, 22 de agosto de 2017

Un buen movimiento para reconciliarse con una vieja idea

En medio de la retirada ruso-china del enfrentamiento con EEUU que supuso la adopción de las sanciones a Corea del Norte, aparece una noticia relevante que supone no sólo un buen movimiento sino que parece, solo parece, reconciliarnos algo con la vieja idea del Nuevo Orden Multilateral que planteaban tanto Rusia como China y que también tiene en los BRICS otro de sus ejes.

Por sorpresa, en un lugar que nadie esperaba, el viernes pasado se abrió en Johanesburgo (Sudáfrica) la primera rama regional del Nuevo Banco de Desarrollo que impulsan los BRICS. La sede central está en Shanghai, pero esta es la primera sucursal que se establece en uno de los países que forman parte de este eje. El hecho es relevante, muy relevante.

Primero, porque supone la apuesta firme de los países BRICS por apuntalar al gobierno del Congreso Nacional Africano, muy debilitado y desgastado tanto por la derecha como por la izquierda, sobre todo por las constantes huelgas del sector minero y eléctrico que han acorralado al gobierno por su constante adopción de políticas económicas neoliberales. Aunque en ellas tuvo que doblegarse ante la fuerza de los huelguistas, esto le refuerza ahora de forma considerable.

Segundo, porque la primera iniciativa ha sido aprobar un préstamo a la empresa estatal eléctrica Eskom para mejorar el servicio y distribución de energía en todo el país. Este préstamo se ha hecho en moneda local sudafricana, el rand, y no se utiliza ni el dólar ni el euro.

Tercero, porque como gran objetivo, además de ayudar a la mejora de la infraestructura de Sudáfrica, se ha lanzado el contundente mensaje de que está abierto a realizar préstamos "a todo el continente africano", para lo que se ha abierto una Oficina Regional que se dedicará a analizar y aprobar las propuestas que lleguen desde otros países. Esos préstamos, si se llegan a producir, serán en las monedas locales y eso es un desafío en toda regla de la norma financiera internacional actual (dólar, euro, yuan, yen y libra esterlina).

Cuarto, porque la apertura de la sucursal del NBD se llevó a cabo el mismo día en que se reunían en Johanesburgo los presidentes de los bancos centrales de todos los países africanos. En esta reunión se abordó el papel de estos bancos en el desarrollo de la economía del continente y la falta de control que existe en muchos de ellos por parte de los estados para gestionar la economía. En muchos países africanos, sobre todo los de raza negra, existen Bancos de Reserva que no están bajo el control del Estado, lo que no asegura un equilibrado y sostenible crecimiento de los países, como se ha dicho en esa reunión. También se ha hecho mucho énfasis en la necesidad de "proteger el bienestar social y económico de la población".

Aunque no veréis por aquí ninguna información al respecto, en Sudáfrica sí se ha publicado que el BM ha dicho que "hay que garantizar la independencia" de esos bancos respecto a los gobiernos. Es una nada sutil llamada de atención a que no se desvíen de la ortodoxia neoliberal. Es decir, que lo que se dice es, simple y llanamente, que no tienen que implementar políticas afines a las que promuevan los gobiernos sino asegurar los intereses del poder mundial.

Por lo tanto, la apertura del NBD en Sudáfrica es un desafío, veremos si grande o pequeño, al BM y sus propuestas así como un buen movimiento para reconciliarnos a algunos, como a mí, un poco con la vieja idea del Nuevo Orden Multilateral que se arrojó por la borda con la votación en la ONU de las sanciones a Corea del Norte.

Por cierto, no hace muchas horas que EEUU ha aprobado nuevas sanciones contra el "programa de armas de destrucción masiva de Corea del Norte" y ¿a qué no sabéis a quién sanciona ahora? Pues a empresas e individuos chinos y rusos. El monumental error de chinos y rusos plegándose a EEUU en la ONU no les está sirviendo de nada, más bien parece que EEUU aplica el viejo adagio romano: "no se paga a los traidores".

Aún no tengo información de lo que han dicho ni Rusia ni China, aunque supongo que no irán más allá de las protestas, como vienen haciendo desde hace tres semanas. Estaría muy bien que, por fin, reconociesen que con psicópatas como los estadounidenses no se puede ni hablar. Estaría muy bien que se diesen cuenta de una vez que hay que aplicar las mismas recetas, o sea, sancionar a EEUU. Y decir que mandan a la mierda las sanciones contra Corea del Norte.


El Lince