El médico estudió los resultados de las pruebas, levantó la cabeza y sonrió. "Felicidades, está usted embarazada".
Todo lo que pude decir fue ¿por qué? La alegría, la emoción y el miedo se mezclaban. Mi marido y yo no tardaríamos en tener un bebé, llenar nuestra vida con amor y con ruido.
Pero inmediatamente empecé a temer que Israel nos bombardease de nuevo.
¿Cómo podríamos huir si eso ocurriera? ¿Cómo podríamos sobrevivir?
Estaba asustada y nerviosa. Los recuerdos de todas las guerras que había vivido me dominaron.
A pesar de que soy una trabajadora de los medios, trato de evitar ver las noticias cuando Israel nos bombardea, para ahorrarme la visión de los cuerpos triturados, de las madres llorando a sus hijos.
Cuando Israel bombardeó Gaza en noviembre de 2012, la televisión mostró a una madre corriendo de derecha a izquierda en un hospital después de haber visto los cuerpos de tres de sus hijos. Buscaba a la cuarta y preguntaba a todos a su alrededor si alguien sabía dónde estaba la niña.
¿Es eso lo que significa ser madre en Gaza?
Dos años más tarde, durante el ataque de 51 días de Israel en verano de 2014, la mayor parte de mi familia, incluyendo a mi hermana y sus cuatro hijos, durmió en el suelo de la sala de estar en la parte occidental de nuestro apartamento. La oriental está situada justo encima de un apartamento que pertenecía a un hombre que era buscado por Israel. Mi habitación estaba situada justo en ese lado. Yo dormí en ella durante toda la guerra, a pesar de que sabía que estaba justo encima de un objetivo probable. Nunca tuve miedo porque creía que no iba a oír o sentir el misil que terminaría matándome.
Una noche, los bombardeos se intensificaron terriblemente y mi madre insistió en que durmiese en la sala de estar con todos los demás. No la pude convencer de que el misil no tiene ninguna capacidad intelectual para reconocer que se acercaría a nuestra sala de estar y cambiaría su trayectoria.
Cuando nos sentamos en silencio, mi hermana Walaa comenzó a separar frenéticamente a sus hijos, dos a un lado de la casa y otros dos, al otro. Temblando de miedo me dijo: "voy a poner a un niño y a una niña en el lado derecho y a los otros en el lado izquierdo; así probablemente dos sobrevivirán. No quiero verles morir todos a la vez".
Me tomó un tiempo procesar lo que había dicho. Forcé una sonrisa mientras las lágrimas se asomaban a mis ojos. Me deslicé entre las sábanas, fingiendo dormir, pero lloré toda la noche.
Estuve alerta toda la noche. Walaa no durmió, como su hija mayor, Shahd, que tenía seis años. Shahd estaba despierta, asustada, y se levantó al pasillo. Walaa intentaba calmarla y hacer que se durmiera.
Al final no nos bombardearon. Pero eso no quiere decir que estuviésemos ilesas.
Han pasado casi tres años. Me he casado y tengo una niña hermosa y saludable , de pelo negro y dos hoyuelos en las mejillas. Tiene seis meses.
Estoy feliz de ser madre y amo a mi hija más allá de las palabras. Pero también tengo miedo. No puedo soportar la idea de que soy una palestina de Gaza y que tengo que adivinar qué parte de nuestro hogar es la menos probable para que muera mi bebé. Cada vez que escucho un sonido fuerte, corro hacia mi hija y la abrazo. Cuando escucho un trueno, me agacho y trato de cubrirla para protegerla.
El caos que la última guerra forjó en mi alma es inmenso, el sonido de los bombardeos y los bombardeos me han traumatizado desde entonces.
Llevo a mi hija conmigo a todas partes, a las reuniones con los funcionarios y los notables, sin importarme lo que piensen, sin preocuparme cuando escucho su llanto en las grabaciones de audio o cuando estoy transcribiendo mis entrevistas. Lo único que me importa es que ella está conmigo y cualquiera que sea nuestro destino, lo compartiremos juntas.
Nesma Seyam
P.D.- Tomado de Electronic Intifada. En el último ataque del régimen fascista de Israel contra Gaza murieron 18 periodistas, sin que los demócratas habituales (EEUU y sus vasallos europeos) hiciesen el menor comentario ni la menor crítica. Recordad toda la histeria de los demócratas habituales con el ataque islamista a la revista francesa Charlie Hebdo. Y este vídeo de respuesta de los palestinos. Entenderéis mejor el miedo de Nesma.
El Lince
Israel es un engendro sionista anglosajon que debe ser borrado del mapa, no tengo la menor duda, como puede ser que una pequeña porcion de Tierra amenaze al resto de la humanidad.
ResponderEliminarSin embargo fue culpa de la ignorancia otro vez, si no como se explica el nacimiento de algo asi, debimos todos luchar hasta morir, y esto es literal, nunca se debio permitir esta locura, hoy mismo pasando ante nuestros ojos, y la gente mirando para el otro lado, eso es todo.
Y la gente desgraciadamente, esta llena de ingorantes, sin contar los que han recibido educacion y no saben como desprogramarse de tanta basura que tienen en el coco.
Son unos pocos vemos a traves del bosque, "todos somos ignorantes pero no todos ignoramos las mismas cosas" y agregaria, y "tambien DISCERNIMOS".