viernes, 1 de diciembre de 2017

El camino hacia el infierno

Voy a aclarar algunas cuestiones a pedido de Eugenio. Habla de un viaje que hizo un enviado del Partido Comunista de China a Corea del Norte, tras el XIX Congreso del Partido el pasado mes de octubre, y que como consecuencia del mismo los dos países habrían acordado el mantenimiento y un cierto impulso a las relaciones económicas. Simplemente no es cierto. Lo que se ha dicho es de cara a la galería, para tranquilizar conciencias pudibundas que son incapaces de ver el giro dado por los chinos en su política exterior.

Que China no quiere el colapso total de Corea del Norte es más que evidente. Que China ha sido quien no ha querido una repetición de lo ocurrido con Irak, cuando se impusieron unas draconianas sanciones que causaron la muerte de un millón de niños de menos de cinco años -es decir, toda una generación- y, también hay que decirlo, sanciones que contaron con el apoyo de China y de Rusia, también es cierto. Por eso yo digo que se ha dejado a Corea del Norte a dos dedos de la muerte, pero no se la ha matado. Pero que China está imponiendo sus propias sanciones unilaterales, al margen de las del CSONU -que son las únicas obligatorias de seguir según el derecho internacional- también es cierto.

Por ejemplo, Corea del Norte ha denunciado públicamente que China ha dejado de suministrar gasolina y diésel desde el mes de octubre. Esta es una petición histórica de EEUU, que ha vuelto a solicitar ahora tras el lanzamiento del nuevo misil.

El viaje de Song Tao, que sólo es Jefe del Departamento de Enlace Internacional del PCCh, es decir, ha sido un viaje de partido a partido y no de Estado a Estado, se ha producido cuando las relaciones entre los dos países están en su punto más bajo, cuando China ha demostrado en la ONU que es cada vez más duro con Corea del Norte y, lo más importante, que China ha decidido no solo tomarse en serio las sanciones sino ser un co-impulsor de las mismas junto a EEUU. Los rusos han dicho que así fue.

Es cierto, también, que hasta septiembre la dureza china no duraba mucho, un par de meses para aplacar a EEUU, y luego abría agujeros bastante grandes para que pasase todo tipo de ayuda y las cosas, sobre todo los negocios, sus negocios, volviesen a ser como siempre. Pero hasta septiembre. Ahora no es así ni mucho menos.

Mirad la secuencia:

- En septiembre China suspendió la importación de mariscos frescos (aunque mantiene los congelados), al igual que la de minerales que se ha reducido a un escaso 13%.

- En octubre China anunció que las empresas conjuntas no continuarían sus operaciones a partir de enero de 2018. También ordenó el cierre de los restaurantes norcoreanos en Dandong, Sheyang y otras ciudades fronterizas con lo que unos cuantos cientos de trabajadores norcoreanos tendrán que volver y su país dejar de recibir esas divisas.

- En noviembre se ha notificado a las empresas chinas que emplean a trabajadores norcoreanos que se abstengan de renovar los contratos. Se calcula que unos 30.000 trabajadores norcoreanos se quedarán sin trabajo en un breve lapso de tiempo.

A ello hay que añadir que se ha "sugerido" a las empresas de viajes que dejen de gestionar sus giras por Corea del Norte (que es ahora mismo el país preferido para los chinos como destino turístico, un poco como lo fue Cuba durante un tiempo para muchos "progres" por aquello de que cambiaría cuando muriese Fidel) y que los vuelos de la compañía aérea norcoreana están suspendidos, formalmente por "falta de pasajeros".

El monto total en el que se calcula que va a costar todo ello a Corea del Norte es de unos 200 millones de dólares anuales.

Además, el gobierno chino ha dicho a las provincias de Liaoning y Shandong que deben preparse para "hacer sacrificios" debido a las sanciones contra Corea del Norte porque gran parte de la población vive, directa o indirectamente, del comercio con Corea del Norte.

Hasta septiembre es cierto que China ha sido muy táctica con las sanciones y que permitía que se las torease al cabo de un tiempo. Hasta septiembre.

La postura china hasta entonces era muy fácil de seguir: mientras una Corea del Norte con armas nucleares es "peligrosa y desestabilizadora", como decía Beijing, el colapso del país -guerra o unificación con Seúl- era una "amenaza superior" que lo anterior. De ahí que permitiese, cuando no alentase, la permeabilidad de esas sanciones. Pero eso ha cambiado totalmente.

China ha abandonado a Corea de Norte porque no quiere un enfrentamiento con EEUU, especialmente si EEUU pone en marcha lo que se conoce como "sanciones secundarias", que irían dirigidas contra las empresas chinas y establecerían un precedente peligroso puesto que China se vería obligada a tomar represalias, y eso es lo que no quieren los chinos mientras no esté asentada su estrategia de Nueva Ruta de la Seda.

Supongamos, y es un suponer que yo no veo, que China cree que actuando así obliga a Corea del Norte a volver al redil chino y que negociará algún acuerdo político con Beijing para sacudirse de encima la presión, sobre todo de las sanciones. Supongamos que una de las cosas que Corea del Norte plantea a China es algo así como "conservo mis armas nucleares y, a cambio, acepto vuestras sugerencias en otros temas", tanto internos como externos. ¿Qué va a decir China cuando mantiene que la península tiene que desnuclearizarse? ¿Corea del Norte ha llegado hasta aquí para decir ahora que no, al estilo de Puigdemont y los suyos (-querido Azotea, hay que ver un poco más allá, con independencia de resultados electorales y otros cuentos-)? No es creíble.

China está alineada con EEUU en este asunto sin la menor duda. Los chinos se caracterizan por muchas cosas, una de ellas el lenguaje. Este párrafo es muy claro: "El enfrentamiento entre los Estados Unidos y la RPDC es asimétrico. Ambas partes se miran a los ojos. Sin embargo, Estados Unidos se encuentra en una habitación cálida y Corea del Norte se encuentra en la nieve helada".

美朝对峙是非对称的,双方互瞪着眼睛,但是美方站在暖洋洋的房间里,朝鲜站在冰冷的雪地上。

Viene a decir que Corea de Norte tiene que ceder si no quiere que las cosas vayan a peor porque "China ha hecho todo lo posible por ayudar a mantener el sustento básico de Corea del Norte". Ha hecho, no hace ni está haciendo. Sobre todo por lo que viene después, que es demoledor: "En la era de la globalización, es imposible para China luchar por una ayuda económica a Corea [del Norte]".

Por supuesto que me puedo equivocar, es más, me encantaría equivocarme. Pero como dice un refrán castellano, y en referencia a que si China y Corea del Norte continúan comerciando con normalidad o que ese comercio se incrementa, "el camino hacia el infierno está empedrado de buenas intenciones". Las intenciones no cuentan, lo que cuentan son los hechos y ahora mismo son los que son.

El Lince

2 comentarios:

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  2. Incluso los rusos se están empezando a mover por su propia cuenta en esta cuestión. Aún me resulta increíble que los Nacionalistas Conservadores rusos tengan más claro (y hasta ahora han tenido exito) de como limitar el capitalismo global que el propio Partido Comunista Chino (y en general toda la izaquierda occiddental)

    (Moscow is against economic blockade of North Korea, the Russian top diplomat says)

    http://tass.com/politics/978223

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